Jordi Turull, diputado de CiU en el Parlamento catalán, fue el que abrió el debate sobre el desafío separatista catalán. En su alocución defendió la celebración de la consulta aunque pronto mostró su verdadera cara. "El pueblo de Cataluña ha iniciado un camino sin retorno", dijo.
En este sentido, Turull afirmó que los catalanes "han hablado alto en las urnas y en las calles" y citó la última Diada y la cadena humana separatista. "Cataluña quiere protagonizar un ejercicio ejemplar de democracia. Quiere votar para decidir, y decidir para progresar y para tener un futuro mejor".
En su opinión, el referéndum "es legal y posible" y añadió que "si hay voluntad política tiene cabida en la Constitución". "Si se quiere, se puede", sentenció. El diputado de CiU insistió en que "las urnas son la única forma de saber qué queremos los catalanes" y advirtió de que "nadie" debe "subestimar lo que está ocurriendo en Cataluña".
El representante de CiU afirmó desde la tribuna que "los ciudadanos están protagonizando un nuevo proceso en nuestra historia" al que se ha llegado tras una gran "sensación de fatiga, de haberlo intentado todo para que hubiera un encaje cómodo".
Turull agregó que no pararán en su desafío puesto que "Cataluña quiere mantener y mejorar aquello que amamos, nuestra lengua, cultura, instituciones y autogobierno". Y esto, a su juicio, se traduce "votando y decidiendo".
"Por eso los ciudadanos de Cataluña han protagonizando un nuevo episodio, han decidido no resignarse a mantener la relación política con y para un Estado que está diciendo que su autogobierno, lengua e instituciones avanzan hacia la residualidad", avisó.
Al final, Turull ha pedido "reafirmación y no resignación". "Que nadie se lleve a engaño: el pueblo de Cataluña no se ha metido en un callejón sin salida. Ha iniciado un camino sin retorno, pacífico, democrático para elegir su futuro", ha dicho.
Tras Turull, ha hablado la diputada de ERC Marta Rovira, con un discurso a ratos desconcertante en el que ha pedido, entre otras cosas, imaginar una urna llena de votos y "una mesa, dos sillas y un bolígrafo" como escenario para el pacto por Cataluña. "Hoy tienen la oportunidad de pasar a color una fotografía que vemos en blanco y negro", ha dicho.
"No es un debate sobre independencia"
Más tarde le tocó el turno al portavoz del CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, que comenzó su intervención asegurando que "no estamos dispuestos a recibir lecciones" del Gobierno y del Partido Popular. En este sentido, el líder de Unió confesó que espera que Rajoy "ofreciera alguna vía de diálogo" aunque dijo que la conclusión que ha sacado es que "cierra hoy las puertas al mismo".
El líder de Unió dedicó buena parte de su intervención para defender que lo que quiere el Parlamento de Cataluña es un referéndum "consultivo". En su opinión, "no se discute la presencia de Cataluña en España, no es un debate sobre la independencia". Por ello, agregó: "ruego a esta Cámara que no cierre las puertas que el Constitucional ha dejado abiertas al diálogo que puede llevar a un referéndum consultivo".
Además, Duran dijo al Ejecutivo que "estamos dispuestos a negociar, a negociarlo todo y todo significa todo". Y por ello, instó a que "dejen votar".
Joan Herrera: "Democracia es ser demócrata"
Con su estilo desenfadado, serio e incisivo de siempre, el representante de ICV-EUIA en el parlamento de Cataluña, Joan Herrera, ha tomado la palabra en último lugar para acusar al Gobierno español de cercenar el derecho de los catalanes a decidir su independencia, la separación. Ha comenzado recordando que Cataluña aprobó la Constitución "hace 36 años". Un texto, seguía Herreera, que redactaron catalanes como Miquel Roca o Sole Tura, mientras otros "escribían artículos en contra de esa Constitución, creo que era José María Aznar el que los escribía", ha dicho. En cambio, seguía, ahora "el 80% de la gente reclama en Cataluña poder ser sometidos a una consulta" porque "la situación hoy es radicalmente distinta, los catalanes no pueden considerar la constitución como propia".
Para Herrera, la negativa a dejarles celebrar una consulta separatista, es un escenario "de fin de régimen" y lo ha comparado con las "mareas blancas por la sanidad, las mareas verdes por la educación". En su opinión quienes rompen España son "la sentencia del Estatuto, la LOMCE, la ley del aborto, la reforma laboral".
Así, ha propuesto un "pacto, una salida democrática, una salida política, un acuerdo porque creemos que es la mejor solución. Un acuerdo para que Cataluña pueda decidir sobre su futuro político". Para Herrera, lo "razonable, lo democrático, es canalizar la demanda" de los separatistas y "no negándola". Porque negarla es emplear, para el diputado catalán "el autoritarismo del desprecio en la negativa".
Lo que necesita Cataluña, seguía Herrera es "un PSOE que no apuntale lo viejo y una derecha un poco más británcica". Ante la negativa, ha dicho que "el Constitucional les ha dado la pista para aterrizar. El Constitucional respeta el derecho a decidir", por lo que, "el problema no es la ley, el problema es que son prisioneros del anticatalanismo que han sembrado durante tantos años." Y ha insistido: "Hoy dirán que no se puede. Dirán que se rompe España, pero quien rompe España es quien rescata bancos en contra de los derechos sociales y quien no reconoce el derecho a decidir. Eso es lo que rompe España".
Finalmente, ha dicho que "4 de cada 10 españoles están por que los catalanes puedan decidir y esa es nuestra esperanza. Porque hay gente que quiere independizarse". Ha concluido diciendo que "democracia es ser demócrata"