Miguel Arias Cañete defiende que tiene una buena relación con Aznar; que son amigos. Lo primero que hizo una vez confirmado candidato fue recordar que el hoy expresidente llevó a España a una posición privilegiada en el seno de la Unión Europea; que empezó a contar en el mundo. Por ello, su equipo asegura que le hubiera "encantado" que participara en campaña y, de hecho, aún no cierran la puerta pese a que parezca improbable.
El cabeza de cartel, un pata negra que -eso sí- se declara "100% marianista", buscó la reconciliación con Aznar y reconoció que en la campaña del PP "va todo un poco tarde". Antes, el lunes por la tarde, Carlos Floriano -que es su responsable de campaña- llamó a Javier Zarzalejos -el secretario general de FAES- para invitar formalmente al expresidente a estar en los mítines. Y, por la mañana, Cañete hizo autocrítica para tratar de acercarse a Aznar: "Siempre hay mucha gente que quiere enredar y decir que excluyen a quién... No, no es verdad, lo que pasa es que no teníamos cerrada la campaña, simplemente. Si es que... Va todo un poco tarde, el candidato se ha nombrado tarde y he dejado de ser ministro tarde", aseguró en RNE.
En otro acto matutino, junto a Esperanza Aguirre, Cañete insistió en que quería compartir escenario con el que otrora fuera su jefe. Si bien, poco después de las palabras del candidato, el entorno del expresidente aseguraba que la llamada de Floriano llegaba "demasiado tarde" y que la agenda ya estaba cerrada. La dirección nacional y miembros del Gobierno se quejaron de que Aznar había creado la polémica porque "le han llamado cuando corresponde".
Crítica a la política de comunicación
En la entrevista, Cañete también reconoció, apenas 24 horas después de dejar su responsabilidad como ministro, que la política de comunicación del Gobierno para explicar la salida de la crisis podía ser mejor. "Comunicando no somos los más genios del colegio, somos francamente malos a veces", afirmó, según recoge la agencia Servimedia.
En relación a las encuestas publicadas en las últimas jornadas, que otorgan ventaja al PP sobre el PSOE, Arias Cañete apuntó que "no hay victoria clara porque están los partidos muy próximos" y que lo que hay es "una abstención terrorífica" y "cierto cansancio de la vida política e ignorancia de la importancia del Parlamento Europeo" en la vida de los ciudadanos. "Temo absentismo generalizado, que en mi electorado se puedan ver como unas elecciones baratas y se le pueda dar un toque al Gobierno para que vaya cumpliendo el programa electoral", admitió Arias Cañete, para reconocer que incidirá en campaña en que el Ejecutivo va a cumplir con el programa electoral en el año y medio que queda para el final de la legislatura.
De igual forma, el candidato del PP restó importancia a las agresiones que se han producido en las últimas jornadas a dirigentes políticos como el número dos de la candidatura del PP, Esteban González Pons, o el líder del PSC, Pere Navarro. "La peor campaña que recuerdo fue la de la Guerra de Irak, donde la izquierda boicoteaba todos los actos", fue su argumento.