La magistrada del Tribunal Supremo Margarita Robles ha enviado una carta a sus compañeros de la Asociación Jueces para la Democracia recordando cómo hace treinta años, cuando se investigaba el caso Banca Catalana, sólo ocho magistrados, ella misma entre ellos, pidieron el procesamiento de Jordi Pujol. Por hacerlo, apuntó, recibieron "grandes críticas". Tras la confesión de Pujol sobre sus cuentas en el extranjero, Robles ha destacó que "el tiempo pone las cosas en su sitio".
En Es la Tarde de Dieter, de esRadio, Robles ha compartido algunas reflexiones sobre el carpetazo al proceso, impulsado por los fiscales Carlos Jiménez Villarejo y José María Mena, y ha refrescado cómo tanto los magistrados partidarios del procesamiento como los fiscales recibieron unas críticas "feroces" por la "querella detalladísima" que se presentó en el caso Banca Catalana contra algunos de sus consejeros, Pujol entre ellos.
Según ha explicado Robles, con la carta ha querido "compartir una reflexión" treinta años después y ha insistido en que se sintió "indignada como ciudadana" cuando se archivó el caso. "Queríamos que se siguiera investigando, que la investigación no estaba lo suficientemente avanzada. Con la perspectiva de los años, creo que si se hubiera investigado más, se hubieran podido evitar estas actuaciones", ha comentado tres días después de la confesión del ex presidente catalán.
La magistrada ha calificado de "muy grave" lo ocurrido y ha señalado que la responsabilidad es de "quien lo hace" pero también "de la sociedad en su conjunto". "Ante algunos acontecimientos", las pesquisas no son "lo suficientemente profundas", ha recordado en alusión a los Pujol.
Sobre el momento presente y su evolución judicial, Robles ha manifestado su "confianza en que si el tema llega a los tribunales, tengan elementos de juicio" para hacer "una resolución procedente". Y ha argumentado: "hace treinta años, se hubiera podido seguir el procedimiento, pero los medios de la administración de Justicia eran más limitados. Estoy segura de que en el momento en que este proceso llegue a sede judicial habrá las actuaciones oportunas".
Robles ha insistido en señalar a las instituciones por la situación a la que se ha llegado y ha pedido una "reflexión" tras recordar que Pujol ocultó ese patrimonio durante más de treinta años. Además, ha destacado cómo en 1986, cuando se cerró el caso, acusaron a los jueces disconformes y a los fiscales de "atacar a Cataluña". "La gente se envuelve con las banderas y eso no es verdad", ha dicho Robles, que también ha revelado que ha recibido el apoyo de "muchos compañeros", que están "totalmente de acuerdo con mi reflexión".