Indignación y desesperación. Esto es lo que le queda a Toñi Santiago, la madre de Silvia, la niña que justamente hace doce años fue asesinada por ETA en Santa Pola. En una entrevista en Es la Tarde de Dieter de esRadio se mostró muy contundente y dura ante la política de cesiones que se está llevando con los terroristas y su entorno.
En este sentido, Toñi afirmó que "no me quedan fuerzas porque este país lo han convertido en un país que no merece la pena". Y es que indicó que "los políticos de turno y los jueces han vuelto a asesinar a mi hija" ya que "la muerte de mi hija ha sido en vano".
Durante el aniversario de la muerte de su hija recordó que todo lo que está pasando "se lo tenemos que agradecer al señor Zapatero, el que comienza esta canallada, de la mano del cobarde del señor Rajoy". Por ello, dijo que quería manifestar públicamente que siente por ambos "el mismo desprecio que por los asesinos de mi hija. Han conseguido que tras doce años hayan enterrado de nuevo a mi hija". "Espero que el PP lo pague en las urnas", sentenció, para añadir que "no voy a perdonar jamás lo que han hecho a mi familia".
En la entrevista en esRadio quiso también añadir que "soy víctima del terrorismo porque ETA lo decidió en 2002 y también soy víctima de este gobierno y de los anteriores, excluyendo el de Aznar". "De mi parte que se vayan todos a la mierda, son todos unos etarras y otros unos cómplices", dijo llena de indignación.
Por último, se refirió a la entrevista que el diario El Mundo ha realizado a un etarra ya libre. Toñi Santiago aseguró que el texto el ha producido un "asco horroroso y me ha causado unas ganas de vomitar terribles". En su opinión, "no se puede perdonar lo que está ocurriendo en este país".
De este modo, dijo que "sabemos que los terroristas son unos cobardes e hijos de puta. En este mal llamado proceso de paz quiero manifestar para ellos todo mi desprecio y mi asco porque han conseguido que una banda de asesinos se salgan con la suya a costa de la sangre de mi hija y de casi mil víctimas más".