La eurodiputada de Podemos,Teresa Rodríguez, vía alternativa a la de Pablo Iglesias en el seno de Podemos y que fue apartada por él mismo de la dirección, quiere dirigir Podemos en Andalucía y optar a la presidencia de la Junta de Andalucía. Lo primero que ha dicho es que el caso Errejón es consecuencia de las "ganas que nos tienen". Lo segundo, atacar frontalmente a Susana Díaz, el voto del mal menor que tiene a Chaves y Griñán en la mochila.
En Andalucía hay ya 172 círculos con más de 41.000 inscritos en ellos y debe constituirse el Consejo Ciudadano que decida quién será el candidato o candidata de Podemos al gobierno de Andalucía.
Sus planteamientos iniciales son la defensa de la autonomía andaluza y salir del subdesarrollo económico. En una entrevista con El País, afirma que "los andaluces no han salido de su situación de dependencia en todo el período socialista de gobierno y que las grandes empresas no han dejado nada sembrado para los tiempos de vacas flacas que son ahora. Andalucía es la campeona en desahucios, la región con más desempleo. Los Gobiernos del PSOE son los que han construido un marco en el que la comunidad ha sido incapaz de salir de su subdesarrollo."
Añade Rodríguez que el pacto firmado por PSOE e IU no se ha cumplido. Las líneas rojas del pacto se atravesaron rápidamente, como la promesa de no tocar los servicios públicos cuando se ha recortado en educación y sanidad, o externalizar servicios. Por ello piden elecciones anticipadas porque es "más honesto es dejar que la gente decida."
Igualmente reta a Susana Díaz a un debate sobre la renovación y recuerda que en la mochila de la actual presidenta y líder del PSOE andaluz están Griñán y Chaves.
Su posición en Podemos, un enigma
Poco se sabe acerca de quienes forman Podemos en Andalucía, pero ya se ha visto cómo a las candidaturas impulsadas por Pablo Iglesias o fieles al mismo, se oponen otras diferentes. Es lo que ocurre, precisamente en Sevilla.
En el caso de Teresa Rodríguez, fue su pertenencia a la trotskista Izquierda Anticapitalista la que provocó su apartamiento de la dirección de Podemos. Rodríguez cree, al contrario que Iglesias, que la doble militancia puede ser leal. A pesar de sus diferencias con Iglesias y su equipo, cree, que ahora "es precisa una organización fuerte y centralizada, afrontar de cara el ciclo electoral que viene y ser capaces de ganar". Pero según ella, es imposible que Podemos se convierta, a corto plazo, en una organización jerárquica y burocratizada.
De consolidarse como cabeza de cartel de Podemos en Andalucía podría establecer una relación con Pablo Iglesias, parecida a la que mantiene Susana Díaz con Pedro Sánchez, siendo la "baronesa" con más poder dentro del nuevo partido.