Sucedió el pasado domingo, cuando un guardia civil -de la Agrupación de Tráfico de Madrid- fue arrollado en la autovía de Andalucía (A-4) mientras acudía a atender otro siniestro. El agente se paró para atender un coche accidentado y bajó de su vehículo. Fue entonces cuando otro conductor perdió el control de su vehículo y se empotró contra la mediana llevándose por delante al agente.
El golpe fue tan violento que el agente salió despedido y quedó tendido del otro lado de la mediana, justo al margen del carril izquierdo. Varios conductores pararon sus coches y corrieron a atender al agente. Toda la escena fue recogida por las cámaras de la Dirección General de Tráfico.
Los compañeros del agente relataron que el coche le alcanzó cuando regresaba al vehículo patrulla a por un chubasquero justo después de colocar los conos de señalización para cortar el carril izquierdo, donde habían quedado inmovilizados los coches del accidente que había acudido a socorrer.
Pese a la dureza del accidente, el agente sufrió algunas heridas leves y una fisura en la cadera. Recibió el alta hospitalaria a los pocos días.