Tal día como hoy, 12 de febrero, pero de 2011, Libertad Digital contaba en su portada la oferta del Barcelona que podría haber recibido Telma Ortiz y que estaba valorando si aceptarla. Gabriel Masfurroll era el encargado de potenciar al máximo la fundación y expandirla por África, Latinoamérica y Asia. Telma, que habla varios idiomas y ha participado en misiones humanitarias, encajaría a la perfección con el puesto.
Más de un año después de estos rumores dejó su cargo como subdirectora municipal de Relaciones Internacionales y por el que cobraba unos 50.000 euros anuales. Así lo anunció el alcalde de Barcelona, Xavier Trias. Cuando estaba en la oposición, Trias puso en duda la forma en la que se contrató a Telma Ortiz, pero reconoció que se había dado cuenta de que era "una persona plenamente competente".
También se rumoreó con que podría haber encontrado trabajo en la ONG Mensajeros por la Paz, dedicada a atender necesidades de niños, enfermos y personas de la tercera edad. El fundador de la organización, el padre Ángel, aseguró que "ojalá venga a trabajar con nosotros", aunque no confirmó la incorporación de la hermana de la reina Letizia ni si sería un trabajo remunerado: "Si viene, sería como voluntaria o trabajadora, aún no lo hemos planteado".
No fue hasta abril de 2014 cuando se supo que ya tenía trabajo. Según La Otra Crónica de El Mundo, la hermana de la Reina trabajaba desde hacía unas semanas en la sede de Barcelona de ESERP, una escuela de negocios que figuraba entre las mejores del país junto a ESADE. Allí Telma ejercía de los suyo, como directora de Relaciones Internacionales. Además, trabajaba para su propietario, que presumía de ser monárquico y que además era miembro de la Comisión de Control de La Caixa.