Ante la indignación de las víctimas del terrorismo, los familiares de los presos etarras han paseado estos días sus pretensiones por el Parlamento Europeo, donde han sido recibidos, y hasta reconfortados, por varios diputados de diversos grupos políticos. "Nos han expresado su solidaridad con nuestro sufrimiento", han asegurado los familiares en referencia a miembros de Podemos e Izquierda Unida, con los que han participado en una reunión interna del grupo parlamentario de la Izquierda Unitaria (GUE) para denunciar "la violación de los derechos humanos" que dicen padecer a causa de la política penitenciaria.
Eurodiputados de todo el arco parlamentario –miembros desde Syriza hasta el Partido Popular Europeo- han abierto sus puertas a lo que la eurodiputada popular Teresa Jiménez Becerril (hermana del concejal asesinado por ETA) ha denominado "el lobby de ETA". Muy molesta también con un compañero luxemburgués de su propio grupo que jaleó la causa del acercamiento de los presos de ETA, Becerril denunció la "ignorancia y osadía" con las que se trata el tema en el Parlamento Europeo.
A su lado, la eurodiputada de UPyD Maite Pagazaurtundúa denunciaba la "perversión del lenguaje" de quienes llaman "presos políticos" a los asesinos y se niegan a condenar la violencia. "Ha habido dolor por ambas partes", repiten los familiares de los presos, eludiendo expresamente responder a la invitación de las víctimas: "Que amen a sus seres queridos es natural, pero que condenen los asesinatos", les retaba Pagazaurtundua.