Menú

La imposibilidad de clonar a Albert Rivera

El líder de Ciudadanos madura si liderar el constitucionalismo en Cataluña o ser candidato a presidente del Gobierno

El líder de Ciudadanos madura si liderar el constitucionalismo en Cataluña o ser candidato a presidente del Gobierno

La sala de máquinas de Ciudadanos echa humo. 2015 es el año de la consolidación nacional y quién sabe si de algo más, pues las expectativas han crecido en este primer trimestre del año hasta un límite insospechado. Tanto que determinadas estrategias ideadas por rivales como el PP, consistentes en presentar a Albert Rivera como un líder circunscrito a Cataluña, se han quedado viejas practicamente antes de nacer, aunque la misma Rosa Díez ha pretendido reeditarla hablando en Málaga de las "burbujas de cava catalán".

Lo cierto es que todo va muy deprisa para este partido emergente, como confiesa en privado un destacado miembro de la Ejecutiva: "hace unas semanas concurrir a las elecciones en Andalucía era un reto que casi nos parecía grande, pero ahora vislumbramos incluso la posibilidad de obtener representación en casi todas las provincias". Otro miembro de la Ejecutiva relata el cambio experimentado en esa comunidad: "el año pasado paseabas por Sevilla o Málaga con Albert y le saludaban algunas personas, ahora casi no puede caminar en algunos sitios, notamos mucha ilusión en la gente con nuestro proyecto".

Pero a día de hoy, y a la espera de testar la verdadera fuerza de Ciudadanos en las municipales y autonómicas de mayo, dos meses después de la cita en Andalucía, el dilema de Albert Rivera y de todo su partido sigue siendo el mismo, y la solución igual de complicada: ser de nuevo candidato en las elecciones catalanas de septiembre, con unas encuestas que sitúan a Ciudadanos como primera fuerza constitucionalista del Parlament, o liderar la candidatura a las generales como número uno por Madrid. La decisión no es fácil por lo ajustado de los plazos, pues las generales serán como muy tarde en enero; por la dificultad de encontrar un sustituto e, incluso, por lo que supone a nivel personal para el presidente de Ciudadanos, padre separado de una niña pequeña que vive en Barcelona con su madre.

El asunto es tema recurrente de conversación en la cúpula del partido naranja. El lunes en Madrid, poco después de la presentación de los candidatos autonómico y municipal, un miembro de la Ejecutiva bromeaba: "no hay ningún problema, le clonamos y ya está". Algunos de los más cercanos a Rivera asumen que tienen que trabajar en visibilizar otros liderazgos y se muestran abiertos a que concurra a las dos citas electorales, catalanas y generales, siempre y cuando esa maniobra se presente con un "relato" coherente: "lo que no podemos hacer es engañar a la gente como los viejos partidos, presentar a alguien para que luego, sin haber dicho nada previamente, renuncie enseguida a su acta. Si nos decantamos por esa opción será con las cartas sobre la mesa desde el principio".

Posibles sustitutos

Aunque formalmente no se ha decidido nada, varios nombres surgen en la especulación sobre un candidato en Cataluña que no sea Rivera. En el ámbito político la diputada Carina Mejías, aunque en mayo será la candidata a las municipales de Barcelona, donde Ciudadanos puede entrar por primera vez con un importante grupo municipal. En el ámbito de los intelectuales que impulsaron hace una década el partido dos nombres siguen siendo referentes fundamentales para las bases: Arcadi Espada y Francesc De Carreras. Se trata de un tipo de candidatura ahora en boga tras la apuesta en Madrid del PSOE por Ángel Gabilondo y de IU por Luis García Montero. El pasado lunes en la capital de España Rivera abrió la puerta a esa posibilidad en la rueda de prensa aunque dejó claro que cualquiera que quiera ser candidato en Ciudadanos debe someterse a unas primarias.

Además de Rivera, dos personas con peso específico para reforzar las listas a las generales son Luis Garicano, el `ministro´ de economía de Ciudadanos, y el eurodiputado Juan Carlos Girauta, persona de la máxima confianza del presidente del partido y muy involucrado en la estrategia a nivel nacional. Girauta, abogado y escritor, además de experto en management, es el muñidor principal de la propuesta reformista de Movimiento Ciudadano que ya han firmado 70.000 españoles y en la que se ha asentado la expansión nacional.

En verano, con un mapa autonómico y municipal que demostrará la verdadera implantación de Ciudadanos, Albert Rivera tendrá que tomar la que puede ser la decisión más importante de su vida política.

Temas

En España

    0
    comentarios