En el debate del pasado martes, el representante de Podemos afirmó que Andalucía debía desobedecer al Estado y hacer las cosas a su manera al margen de la legislación y de las reglas. Susana Díaz ha advertido a su secretario general, Pedro Sánchez, que va por libre. Ayer dijo que el PSOE de Andalucía trazará su hoja de ruta en lo que se refiere a pactos poselectorales, desobedeciendo así la norma interna socialista de que los pactos se deciden en el Comité Federal. Eso sí, afirmó que contará con el apoyo del PSOE a nivel nacional.
"Yo sólo me debo a los andaluces y, por lo tanto, no me van a afectar estrategias de partido ni voy a dejar que nadie le diga a los andaluces lo que tenemos que hacer y sólo me voy a deber a ellos", aseguró durante una visita a la provincia de Cádiz. Respondía así al exministro José Bono que solicitaba al PSOE que definiera su política de acuerdos con las demás fuerzas políticas para que no pacte "cada uno con quien se le antoje".
La actitud de la jefa del Ejecutivo andaluz se ha explicitado poco antes de su coincidencia en Almería, la primera de dos, con Pedro Sánchez en la campaña andaluza.
Las declaraciones "insumisas" de Susana Díaz reconocen en cierto modo que los pactos van a ser necesarios porque no podrá obtener una mayoría suficiente para gobernar en solitario, único resultado que le hubiera servido para catapultarse con garantía a la política nacional. Por otro lado, sus manifestaciones delatan el temor de que las decisiones nacionales del PSOE en el resto de España afecte a sus intereses. Susana Díaz asegura una y otra vez que no pactará ni con el PP ni con Podemos, lo que equivale a decir que gobernará en minoría con el apoyo puntual de unos u otros. Sin embargo, ahora comienza a reconocer que el Pacto PSOE-IU funcionó razonablemente bien, haciendo inexplicable de ese modo su convocatoria anticipada de elecciones.
Curioso es que la presidenta de la Junta no haya mencionado a Pedro Sánchez ni una sola vez durante la campaña electoral y que suelta amarras de su partido: "Sólo me debo a los andaluces, por lo tanto no me van a afectar estrategias de partido ni voy a dejar que nadie nos diga a los andaluces lo que tenemos que hacer".