Como estaba previsto, ninguno de los grupos parlamentarios que suman 62 diputados en la Cámara Andaluza ha votado a favor de la investidura de la candidata socialista, Susana Díaz , como presidenta de la Junta de Andalucía. Como consecuencia sólo ha obtenido los 47 votos procedentes del grupo parlamentario socialista y, legalmente, no puede ser investida porque para ello habría necesitado la mayoría absoluta.
Ahora, procederá seguir con una nueva sesión plenaria en el Parlamento andaluz para ver qué ocurre en la segunda votación donde sólo le será necesario, para obtener la investidura, el voto de una mayoría simple, por lo que será necesaria la abstención de 17 diputados.
La investidura podrá obtenerla de estos modos:
a) Que se abstenga el Partido Popular en su conjunto, o un número suficiente de diputados de este grupo, al menos 17.
b) Que se abstengan conjuntamente los 15 diputados de Podemos y los 5 de Izquierda Unida o 17 de entre ellos.
c) Que se abstengan conjuntamente los 9 diputados de Ciudadanos y los 15 de Podemos o, al menos, 17 de entre ellos.
Tras un debate que comenzó a las 10 de la mañana, ha quedado claro que Susana Díaz considera una irresponsabilidad de los diferentes grupos parlamentarios no votar su investidura porque se impide un gobierno andaluz. Pero ha quedado igualmente claro que ninguno de los grupos parlamentarios tiene confianza en sus palabras y en sus propuestas.
El próximo viernes a las 11 de la mañana se procederá a una nueva votación.