Tras el accidente del Airbus, de este sábado, todos los partidos suspendieron sus actos políticos y electorales por respeto a las víctimas. Todos, menos la señora Camelo, Ana Camelo Gragera, secretaria general del Podemos Cádiz, que fue cazada fotográficamente ayer después del suceso repartiendo panfletos en las calles de Cádiz.
Camelo, feminista fervorosa y caracterizada por su enfrentamiento visceral con el PP, llegó incluso a reventar plenos municipales del gobierno de Teófila Martinez, al menos en dos ocasiones, siendo defendida en tal actitud por Izquierda Unida.
Tras los hechos, en 2014, Podemos ha justificado las acciones explicando que "la protesta ciudadana en el pleno viene siendo una constante durante esta legislatura, y es el fruto de una gestión desastrosa y alejada de la vida de los ciudadanos y ciudadanas de Cádiz, pero también de formas espontáneas de denuncia que han ido proliferando contra la crisis y que ha hecho del pleno un lugar de protesta simbólica. A veces con tensión y otras con menos...".
Pero no era algo nuevo porque en 2011, la propia Camelo cuando era dirigente de IU, junto con Teresa Rodríguez, intentó boicotear un acto del PP de Cádiz en el que intervenía Teófila Martínez.
Ana Camelo es la más genuina expresión del radicalismo de izquierdas llegando a defender, algo que ahora niega, como la secretaria general de Podemos Sevilla, Begoña Gutérrez, la supresión de la subvención a las cofradías e, incluso, el pago de la cera que se usa en las distintas procesiones de Semana Santa.
En una entrevista con Diario de Cádiz, confirmó su aspiración a aislar al PP, de este modo: "No vamos a cogobernar con el PSOE. Ahora bien, hay fórmulas intermedias. Se puede apoyar la investidura de otra fuerza que no sea el PP. Un escenario posible es que el PSOE no tenga mayoría suficiente para gobernar. En tal caso, podríamos darle la llave para que lo hiciera, pero no como coalición, sino como una oposición fuerte y constructiva. Imaginemos que nosotros tenemos siete concejales y que sólo hacen falta dos votos para que otra fuerza, que no sea el PP, pueda gobernar. Pues dos concejales nuestros podrían apoyar con dos votos esa opción y el resto abstenerse. Ese actor político distinto del PP saldría, pero nosotros no entraríamos en ningún pacto de gobierno. IU podría haber apoyado un gobierno en minoría del PSOE en la Junta de Andalucía y pasar a una oposición constructiva, en lugar de apoyarlo cogobernando".