Varias organizaciones dedicadas a luchar contra Israel han hecho público un comunicado en el que critican la decisión del festival Rototom de invitar de nuevo al cantante judío estadounidense Matisyahu y afirman que se debe a presiones políticas y a las acusaciones de antisemitismo vertidas por Israel, unas acusaciones que en realidad han llegado desde todo el mundo.
El comunicado, del que se hace eco Efe, ha sido firmado por diversas organizaciones y colectivos, la mayoría en contra de Israel como la Red Solidaria contra la Ocupación de Palestina (RESCOP-BDS) o Rumbo a Gaza, entre otras muchas.
En el texto intentan defender que la petición de cancelación formulada por BDS Pais Valencià no se debe a ninguna cuestión étnica, religiosa o nacional del cantante –aunque no se ha pedido nada similar a ningún otro participante del Rototom a pesar del historial incluso delictivo de alguno de ellos- sino que se refiere al apoyo de Matisyahu al ejercito israelí, a una presunta incitación al odio contra el pueblo palestino que es imposible encontrar en las letras o las declaraciones del cantante y a su defensa del ataque contra la Flotilla de la Libertad, que desde luego nunca ha sido mencionado hasta el momento por ninguno de los implicados en la cuestión.
El comunicado sigue dando supuestos argumentos en favor de la cancelación del concierto del estadounidense, alegando que se trata de un festival que está dedicado a la promoción de la paz, los derechos humanos y la autodeterminación de los pueblos, y con estas premisas, Matisyahu no tiene cabida en él, -algo que parece más lógico que decida la organización y no estas asociaciones- y concluyen asegurando que la libertad de expresión no ampara la defensa de crímenes de guerra y la violación del derecho internacional.