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Otra "kichería": ya no habrá jurado popular para tratar de la deuda de Cádiz

La Junta, además de confirmar que las deudas deben pagarse, descartó incluso estudiar el concurso que quería impulsar el alcalde de Cádiz.

La Junta, además de confirmar que las deudas deben pagarse, descartó incluso estudiar el concurso que quería impulsar el alcalde de Cádiz.
José María González "Kichi". | EP

Es preciso llamar de algún modo a los "digodiegos" continuos del alcalde de Cádiz sobre los más diferentes asuntos. "Kichería" parece la más apropiada ya que Antonio Burgos designa a la nueva Cádiz con el sobrenombre de "kichilandia". Pues bien, la última "kichería" de José María González "Kichi", ha sido el desdecirse sobre la designación o elección, no se ha llegado a concretar, de un "jurado popular" para opinar que no decidir sobre si el Ayuntamiento de Cádiz debe pagar o no su deuda.

La explicación deriva de la intervención de este miércoles del portavoz de la Junta, Miguel Ángel Vázquez, que deslegitimó y se opuso al procedimiento propuesto por el alcalde de Cádiz. Como es conocido, éste quería un consejo ciudadano o jurado popular para determinar si la deuda de la ciudad de Cádiz, 275 millones de euros, era o no legítima. Igualmente, quería que se pronunciara sobre qué parte de la deuda debería pagarse y qué parte debería dejarse impagada.

La Junta de Andalucía, además de confirmar que las deudas deben pagarse, descartó incluso estudiar el concurso que quería impulsar el alcalde de Cádiz para elegir a unos ciudadanos que formarían parte del "jurado" que analizaría la deuda gaditana. Y lo dijo de este modo: "Para nada es el modelo de la Junta que una especie de asamblea popular sea la que se decide si se paga o no".

Este mismo miércoles, José María González "Kichi" ya dijo que no era cierto que el Ayuntamiento no fuera a pagar sus deudas. Añadió que lo que quería era "auditar de forma participativa" la deuda municipal, a la que calificó de imperdonable.

No se olvide que Podemos gobierna en Cádiz con el apoyo del PSOE, que fue quien permitió que Kichi desalojara del gobierno a la popular Teófila Martínez.

Otras kicherías relevantes

La más importante fue la sustitución del retrato del Jefe del Estado de la España democrática y constitucional en el despacho de la alcaldía gaditana sin conocer, probablemente, que la figura elegida para la sustitución, la del anarquista y ex alcalde de Cádiz en la revolución de 1868, Fermín Salvochea, había participado en la organización de atentados terroristas, incluso en alguno contra la familia Real.

Una segunda bien famosa fue su aceptación, a pesar de las amenazas de algunos miembros de Podemos sobre la Semana Santa y sus celebraciones de la medalla del Nazareno, regidor perpetuo de la ciudad de Cádiz, por su "firme voluntad de ser alcalde de todos los gaditanos". Kichi, que reconoció su falta de fe y su creencia en la separación de la Iglesia y el Estado, anunció que, por ahora, aplazaba ese debate para un futuro indefinido, relató el Diario de Cádiz. Pero ya ha sentado las bases para revisar la aportación municipal a los presupuestos de las Hermandades de la capital.

Una tercera y no aclarada del todo, fue su enfrentamiento radical con el consulado honorario de Alemania con sede en Jerez de la Frontera acerca de unas declaraciones, no confirmadas, del cónsul Marc Erik Schmelcher, sobre supuestos calificativos proferidos en el despacho del alcalde que menospreciaban la figura de Ángela Merkel. Posteriormente, y ante el silencio del consulado y de la embajada alemana, el caso ha quedado oscurecido por el comportamiento insólito del grupo Joly, que afirmó y desmintió su propia información.

Una cuarta, aunque no la última en el tiempo,fue el intento de imponerle a los demás grupos municipales, que disponen de la mayoría absoluta, sus criterios y decisiones sobre sueldos, dietas y demás emolumentos. Naturalmente, la oposición le obligó a rectificar.

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