Alberto Rodríguez, diputado de Podemos y nº 1 por Tenerife, se ha hecho famoso en los medios de comunicación por dos asuntos. El primero, por haber sido detenido en varias ocasiones por agredir a la policía en protestas estudiantiles y huelgas actuando como piquetero. El propio Rodríguez ha mostrado en numerosas ocasiones su "orgullo" por estas acciones añadiendo que lo volvería a hacer.
En segundo lugar, por su característico peinado con rastas que cobró gran protagonismo el día que se constituyó el Congreso de los Diputados, ante la mirada atónita de algunos diputados del PP, incluido el presidente en funciones, Mariano Rajoy.
Sin embargo, poco antes de las elecciones del 20 de diciembre, Alberto Rodríguez iba más allá en una entrevista en Teidevisión-Canal 6, una Tv local de Tenerife, donde daba algunas pinceladas de su ideario político.
Al ser preguntado por si se saltaría la ley en caso de que, en su opinión, se estuviese cometiendo una injusticia, el tinerfeño podemita contestaba con firmeza: "Sí, por supuesto". La cosa no quedaba ahí y se mostraba partidario de la desobediencia civil "dentro de un margen". "Va en nuestro ADN, no podemos renegar de nuestro pasado, ni del 15-M, porque vayamos a presentarnos a las elecciones y al Congreso", apostilla.
También arremetía contra la Ley de Seguridad Ciudadana, conocida como Ley Mordaza, señalando que con esta norma "prácticamente cualquier cosa es hacer desobediencia civil. ¿Qué margen nos dejan?", se pregunta.
Por último, el actual diputado de Podemos criticaba "la política represiva del Gobierno del PP" y justificaba los escraches a políticos: "Evidentemente que tiene justificación. Lo veo perfectamente normal. Hasta pocas cosas pasan en este país con el sufrimiento que hay, hasta demasiado civilizada es la gente", afirma.
De 33 años, hijo de maestra y electricista y operario en una refinería de petróleo, Alberto Rodríguez es unos de los miembros de Podemos más queridos y defendidos en las redes sociales.