Virginia López Negrete conduce la acusación en solitario de Manos Limpias a la infanta como cooperadora necesaria de dos delitos fiscales. Solo una semana después de que la Audiencia Provincial de Palma notificara el calendario del juicio a los ahora 17 acusados en el caso Nóos, la Fiscalía se querelló contra la abogada y el secretario general de Manos Limpias, Miguel Bernad, por un presunto delito de apropiación indebida. Coincide que el Ministerio Fiscal se ha posicionado como el principal defensor de Cristina de Borbón y ha intentado desmontar la acusación del sindicato en varias ocasiones. Este episodio se reprodujo durante el interrogatorio de Pedro Horrach a Iñaki Urangarín, que se reanuda este miércoles.
Según un informe de la Unidad de Inteligencia Financiera, López Negrete y Bernad se habrían repartido 110.000 euros de una cuenta que se nutría con aportaciones de los inversores de Afinsa, la macroestafa de los sellos. En vez de emprender acciones legales, habrían dedicado parte de los fondos al pago de honorarios a la letrada, aunque el sindicato no tiene ánimo de lucro, y a saldar deudas. Ambos acusados sostienen que el dinero sirvió para emprender acciones judiciales. Sin embargo, fracasaron en las mismas y fueron condenados en costas.
Conspiración del Estado
López Negrete ha acudido este martes a los Juzgados de Madrid para defender su inocencia. Sin embargo, la abogada de Manos Limpias se ha negado a que grabaran su declaración por sospechas sobre la Fiscalía. A su entender, el Ministerio Público quería filtrar el sonido de su interrogatorio para desacreditar su trabajo en el sindicato. Para evitar esta situación, presentará esta semana su versión por escrito en el Juzgado de Instrucción 18, competente en esta causa. Además, adjuntará 8.000 documentos que, según la letrada, prueban que "no tiene nada que ocultar" sobre los honorarios cobrados y declarados ante la Agencia Tributaria.
Fue la Fiscalía Anticorrupción, la misma que intentó desmontar la acusación a la Infanta en el caso Nóos, quien se querelló contra la abogada y el secretario general de Manos Limpias. El juez José Ángel Lera recogió el testigo en Madrid y se negó a cambiar hasta en dos ocasiones la fecha de comparecencia de López Negrete, aunque coincidiera con la declaración de Cristina de Borbón en Palma. La letrada denuncia que todo es una "conspiración del Estado" y acusa al la justicia de "presiones y chantaje psicológico".