Tardà, que el miércoles proclamó la república catalana desde la tribuna, cedió la palabra este viernes al otro portavoz de ERC, Gabriel Rufián. En un tono pausadísimo en comparación con el de su compañero, el republicano cargó contra Ciudadanos y habló de independentismo entre juegos de palabras y con el ánimo, a ratos más bien tímido, del resto de su grupo.
"La gente que dice que si Cataluña se independendiza se convertiría en una república medieval vagando por el espacio sideral", dijo entre otras cosas el republicano, que tachó a Ciudadanos de "hacendado del PP" y atacó a Rivera por, dijo, avergonzarse de ser catalán.
Según dijo, "conocen perfectamente en Cataluña" al partido de Rivera, al que ha definido como "la nueva derecha cool, 2.0, barnizada". "Creer que Rivera es Winston Churchill y no Donald Trump se cura en Cataluña. Se cura en Cataluña viendo cómo salen pitando del Parlament para no condenar el franquismo. Se cura en Cataluña viendo cómo defienden políticas neoliberales", apuntó para asombro de los destinatarios de los descalificativos.
"Creer que Ciudadanos es progresista, reformista o de centro se cura en Cataluña", remató antes de destacar cómo un cordobés, en alusión a Montilla, llegó a ser presidente catalán. En el "Estado español", dijo, no pasaría lo mismo.
Tras excederse en el tiempo, limitado este viernes a los cinco minutos, López le dijo que le daba diez segundos para terminar. Rufián trató de acelerar su dicción pero no le dio tiempo a acabar: cuando enumeraba los apellidos de sus compañeros de partido, el micrófono se apagó y se quedó sin dar más titulares.