El paseo entre Pablo Iglesias y Pedro Sánchez, en ambiente distendido y amable, como dos amigos que se reencuentran para contarse las vacaciones de Semana Santa, ha suscitado hoy comentarios jocosos entre los testigos del encuentro.
Según Sonia López, cronista de EFE, Pablo Iglesias ha visto cumplido uno de sus deseos. Dijo en una rueda de prensa que le gustaría mantener una relación asidua y natural con el líder del PSOE y que fuera normal verles "pasear juntos". Pues hoy se ha producido el paseíllo. Eso sí, con cientos de periodistas expectantes en la Carrera de San Jerónimo para captar esa imagen de Pedro y Pablo dándose un apretón de manos en plena calle antes de reunirse en el Congreso. Según se ha podido saber, antes de hablar del Gobierno han calentado motores con series de televisión, literatura, deportes y cosillas sin importancia.
Ana Rosa se ha fijado más en la indumentaria de los comparecientes. "Ha llegado la moda primavera verano 2016 a la pasarela San Jerónimo, se llevan los pantalones chinos, colores claros, manos en los bolsillos", ha dicho en su programa en Telecinco.
Estas florituras contrastan con la austeridad con la que se reunió ayer Pedro Sánchez con Albert Rivera, impidiendo a los reporteros gráficos hacer fotos con el consiguiente enfado de los profesionales. Aunque no tiene nada que envidiar al boato con el que se firmó el pacto Pedro-Albert ante el cuadro El Abrazo en el Congreso, al que sólo faltó una banda de música.