"Pablo Iglesias nunca quiso pactar nada con el PSOE. Punto. No hay más". Con esta frase el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, sentenciaba el fin del teatro negociador que se ha apurado hasta el último minuto previo a su reunión con el rey Felipe VI. Se cierra el telón con un líder del PSOE que, por fin, asume la convocatoria de elecciones, pero con un clarísimo culpable, Pablo Iglesias, a quien reprocha un "bloqueo inexplicable".
Apesadumbrado y durante una hora de rueda de prensa, Sánchez ha arremetido duramente contra Iglesias porque "ha cerrado la puerta y echado el candado" a un acuerdo, "ha dicho a todo que no" y ha primado y antepuesto sus sillones al cambio de gobierno. Lo digo con mucho pesar: el señor Iglesias nunca quiso pactar con el PSOE".
El secretario general del PSOE achaca la convocatoria de elecciones a un "doble bloqueo" de PP y Podemos pero marca diferencias entre ambos: "El del señor Rajoy lo entiendo porque es para cambiar sus políticas, pero el bloqueo de Iglesias es inexplicable. Se equivoca", dijo el secretario general del PSOE tras sentenciar que "ha ganado el ala dura" de Iglesias frente "al ala moderada de Errejón" que sí pretendía un acercamiento al PSOE en forma de abstención. Motivo por el que auguró: "Los votantes tomarán buena nota" de su actitud.
Sánchez evitó pronunciarse por su temor al famoso sorpasso de la coalición IU-Podemos pero dejó claro que, a pesar de encuestas y sondeos, "lo importante es que se hace con esos escaños" porque lo que ha hecho Podemos "es perpetuar a Mariano Rajoy".
Sacó pecho y agradeció por contra la actitud del PSOE y su comisión negociadora cuyo lema ha sido "sí al cambio antes de las elecciones del 26 de junio y sí después". Porque el ánimo del líder del PSOE permanece "firme e inalterable". "El cambio llevará unos meses", insiste un secretario general del PSOE que sigue sin ver en Podemos a un "adversario" y que se recuerda a sí mismo las palabras de El Quijote "a cualquier mal, buen ánimo repara". "Mi ánimo se ha fortalecido", se repite ante un escenario de campaña para la que ya ha hecho planes.
Repite programa, listas y candidato
Los socialistas creen que un programa y unas listas se piensan "para cuatro años, no para cuatro meses" y por ello, habrá pocos cambios en el planteamiento interno de la inminente campaña electoral. "Mi planteamiento es repetir las listas con las que nos presentamos el pasado 20 de diciembre, mantener el programa electoral del 20 de diciembre y abrir un proceso de primarias para que los compañeros que tengan ganas e ilusión de presentarse a la candidatura a la presidencia del Gobierno lo puedan hacer", dijo Pedro Sánchez con una advertencia a todos ellos: "Ya les adelanto que me presentaré a esas primarias y que espero contar con el respaldo bastante amplio de la organización".
Este miércoles se prevé una reunión de la comisión permanente de la Ejecutiva Federal para convocar al Comité Federal este sábado 30 de abril. Una reunión interna que iniciará el procedimiento de primarias para las que el PSOE tendrá que recortar los plazos de dos meses para nombrar a su candidato. Todo apunta a que Pedro Sánchez será el único candidato dada la ausencia de oposición interna hasta después de la convocatoria electoral.
Se cierra el telón
De nada han servido los movimientos de último minuto con los que el PSOE ha seguido estirando el teatro de la negociación de cara a una convocatoria de elecciones que este lunes reconocían ya abiertamente son "una nueva oportunidad de cambio". El primero, al filo de las 11:00 horas de este martes, la reunión sorpresa en Ferraz del equipo negociador socialista para analizar en la sede socialista el documento enviado por el portavoz de Compromís, Joan Baldovi. Apenas cinco folios que los socialistas han dicho estar "estudiando" en las horas previas a que el secretario general socialista, Pedro Sánchez, se reúna con el rey Felipe VI en Zarzuela.
La propuesta para un acuerdo de EL Prado, bautizada así por Compromís pretende sumar al PSOE y Podemos en un gobierno de último minuto que ayer descartaban tajantes en la dirección socialista, donde proyectaban ya el principal lema de campaña con el que el líder del PSOE acudirá a ver al monarca de España: "El PSOE es el único voto de cambio posible".
Por ello, en clave claramente electoral, los socialistas han intentado dar la sensación de que "por nosotros no va a quedar" y así daban la máxima entidad al documento convocando una reunión/foto improvisada de sus negociadores encabezada por el propio Pedro Sánchez y formada por todos los miembros de la comisión negociadora: Antonio Hernando, Jordi Sevilla, Rodolfo Ares, José Enrrique Serrano, Mª Luisa Carcedo y Meritxell Batet.
A su término, se cancelaban las declaraciones previstas esta mañana por Óscar López en el Senado y se trasladaba el foco al Congreso donde el portavoz, Antonio Hernando, comparecía para anunciar "una contraoferta". "Queremos dar respuesta al documento de Compromís y decir que por nosotros no va a quedar. A las 30 propuestas decimos que sí a 27 y hacemos matices a tres", que son las relativas a la derogación de la reforma laboral, las medidas antideshaucios y la reforma del artículo 135 de la constitución Española.
A la contraoferta se suman tres exigencias a los posibles firmantes: 1) que las organizaciones que frmen este acuerdo se comprometan a apoyar dos presupuestos generales del Estado para darle estabilidad al futuro Gobierno de España; 2) que el Gobierno resultante del acuerdo, "y del acuerdo firmante con Ciudadanos", sea un Gobierno del PSOE con incorporación de independientes; y 3) Pedro Sánchez se compromete a "someterse voluntariamente a una cuestión de confianza en junio de 2018" para revalidar su mandato, tal y como le propusieron hace semanas los sindicatos.
"Si tiene ese apoyo", dijo Hernando en el Congreso sobre lo que le diría Pedro Sánchez este martes a Felipe VI, "el apoyo de Ciudadanos, Podemos y sus confluencias y Compromís, presentará su candidatura a la investidura y a la presidencia del Gobierno".