La Fundación de Investigaciones Marxistas (FIM) y Mundo Obrero, "en colaboración" con la Facultad de Ciencias de la Información de la UCM, ha celebrado este jueves un acto llamado "La izquierda del siglo XXI ante los cambios y transformaciones de la sociedad española contemporánea", protagonizado por el exlíder de IU, Julio Anguita (Fuengirola, 1941), y por el "portavoz nacional" de Anova y Portavoz Parlamentario de AGE, Xosé Manuel Beiras (Santiago de Compostela, 1936).
El evento, que ha tenido por escenario la Sala de Conferencias del edificio nuevo de la citada facultad –el pequeño-, ha sido introducido con brevedad y timidez por la profesora de Historia Mirta Núñez, ya exdirectora de la cátedra carmenita de la Memoria Histórica, y presentada por el moderador, el profesor de Ciencias Políticas Eduardo Sánchez Iglesias, como una docente "muy comprometida" que "ha sufrido mucho" –renunció al citado cargo por no sentirse respaldada por la universidad en "todo el proceso de tergiversación mediática" del callejero a eliminar, o como se diga.
Arrancó Anguita con una colleja al título del acto, diciendo que a él lo que le gusta es hablar de la izquierda "en" el siglo XXI, porque bajo la expresión "la izquierda del siglo XXI", ha oído "cosas terribles". Con un aura como de pope laico y rojo, definía la "izquierda" como "la negación de lo existente" y defendía que la "Gran Utopía" puede realizarse a través de "pequeñas utopías", ejemplificándolo en que, "técnicamente", se le puede dar comida, vestido o educación a todo el mundo y que si esto no se hace "es por causas políticas, económicas y sociales". Tras reconocer que "la izquierda ha tenido errores y horrores" –sin abundar en el detalle-, señalaba que ésta había sido derrotada porque "ha planteado la visión de un mundo alternativo, pero acepta los postulados de su adversario".
Según Anguita, la solución general de la izquierda pasa por enfrentarse a la globalización y crear redes y, concretando en el "pueblo español", señalar que "el primer obstáculo para cumplir los Derechos Humanos es la Unión Europea". Sobre Unidos Podemos, el líder comunista ha manifestado estar "de acuerdo con la confluencia", aunque la ha tildado de "insuficiente si se acaba el 26J". En su opinión, si el partido de Pablo Iglesias y Alberto Garzón no va en paralelo de una "confluencia social" y las reivindicaciones de ésta no "toman cuerpo de propuestas de Estado" rápidamente, "moriremos a los cuatro o cinco meses ante la Troika".
El show de Beiras
Tras la ponencia de Anguita, Beiras, con esa barba y esa melena como de Platero, empezó manso, lejos de la incandescencia habitual, con un tono y una parsimonia que recordaba a la que empleó el diputado de ERC Gabriel Rufián en el Congreso hace, más o menos, un par de meses. El nacionalista gallego sobrecargó inicialmente su ponencia de pausas, de "ehhhmm(s)" y "huuummmm(s)". Valga el siguiente ejemplo: "Mmmm…, eeehmm.., Julio fue muy esclarecedor…, su discurso, ehmm… no hay nada que apostillar".
Así se tiró unos diez minutos, hasta que, tras hacer una división teórica entre "izquierda social" ("represada") e "izquierda política" ("derrotada"), estalló a lo Vesubio: "La derecha sólo puede existir en la Historia mintiendo. Representa al explotador". Y, al poco, añadía: "Esta no es una derecha populista, sino una degeneración del fascismo". El líder de AGE pillaba carrerilla y disparó –en plan metafórico, digo- contra la "época borbónica, no: bubónica. Sólo hay que verles las caras. El extinto políticamente Juan Carlos hablaba como si masticara chocolate".
Después, Beiras comparó las actuaciones de la UE "cuando no le gusta el resultado de las urnas en los países" con lo que hacía EEUU en América Latina quitando y poniendo dictaduras, y, tras señalar al PP como "enemigo", agregaba: "Ha hecho una reinvención del partido único, como los nazis. Prácticamente, donde ha gobernado, ha silenciado a las otras fuerzas políticas". ¿Qué soluciones aportó el nacionalista gallego? Romper con el "ultraliberalismo", abordar una "realidad plurinacional", proclamar la República, crear una "democracia horizontal" y "barrenar la UE".
Finalmente, uno de los asistentes atizó a los medios de comunicación, diciendo que todos "son de la derecha". Respondió Anguita: "Paso olímpicamente de los medios. ¿Es un desprecio a los trabajadores? No, mi hijo fue periodista. Es un desprecio a los de arriba".