El Mundo dice que "el PSOE no descarta desmarcarse del PP en la votación del grupo de CDC para destapar el pacto secreto que creen que existe entre populares y nacionalistas catalanes". Qué pillos. Santiago González está empeñado en cargarle el muerto del gobierno a todo quisqui menos a Rajoy. "Absurdo empecinamiento de los postulantes, el joven Sánchez y Riverita", como llama a Albert Rivera despectivamente, "se van a reunir con el candidato más cualificado (y más votado) para lo mismo que Pablo Iglesias no se reúne, para decir que no. Rivera quiere que sea Pedro quien facilite la investidura mediante su abstención pero si de verdad quiere que el PSOE se abstenga, él solo podría facilitarlo con su voto afirmativo". ¿Desde cuándo forma parte Santiago González del comité federal del PSOE? "Rivera no concibe la posibilidad de negociar con Rajoy y se considera ungido para decir a otro partido político quién debe o no encabezarlos para formar Gobierno". Otros se consideran ungidos para decir qué deben hacer los partidos que no votan. "Ya parecía una rareza que C's quisiera imponer a otro partido las elecciones de sus candidatos mediante un proceso de primarias, pero es decididamente extravagante que las primarias del PP quiera celebrarlas él en la cúpula de Ciudadanos". Vamos, que Rivera se tiene que comer a Rajoy sí o sí. También tiene para Pedro Sánchez. "Su socio de la legislatura pasada sigue emperrado en el no y lo único que explica su actitud es que el fracaso de Rajoy le lleve a una investidura con el voto favorable de Posemos, pero sin contrapartidas, como ellos les regalaron tanto alcalde… Este chico no vale, lo dicen sus compañeros, pero no hay nada que hacer cuando se ha entregado el mando a los incapaces y no hay nadie con decisión y arrojo para hacer del PSOE una alternativa real de Gobierno". En resumen, que todos son unos memos menos Rajoy, que es un santo.
El País dice que "Rajoy ofrece negociar 125 puntos del pacto firmado entre el PSOE y Ciudadanos". Mira, algo avanzamos. Sólo queda la duda de que sea verdad o el deseo de El País. Sandra León habla del "reto común de PSOE y Podemos". "Podemos y PSOE se enfrentan al reto de articular en un mismo discurso la diversidad de preferencias territoriales de los votantes de izquierda. Parten de visiones distintas, por lo que si quieren evitar que la concentración territorial de sus apoyos les impida crecer electoralmente, la posición de uno debería converger algo más hacia la del otro. El que sea capaz de hacer lo primero minimizando los costes ganará cierta ventaja. Los lideres de estos partidos también podrían optar por evitar dicho reto enterrando el tema territorial bajo la alfombra ideológica izquierda-derecha. Sin embargo, dado el contexto actual y las reformas pendientes, no parece que esto vaya a ser posible". Y esto es lo más interesante que lleva hoy El País.
ABC se arropa en la religión. "Francisco llama a los jóvenes a crear una nueva humanidad sin odios ni fronteras". Bonito, eh. Isabel San Sebastián pide a Rajoy que dé a "Sánchez la oportunidad de vengarse -un comportamiento infantil y ruin, desde luego, aunque humano- antes de plegarse a una abstención inevitable". Total qué mas le da, oye, que dé al muchacho el capricho. Pero Mayte Alcaraz dice que ni de coña. Rajoy "no contempla un pleno fallido: 'Uno se pone el chaqué de la boda solo si sabe que se va a casar'". Vamos, que no contempla que le dejen plantado delante del altar. Y dice que Rajoy le está apretando la tuercas a Rivera. "El líder de Ciudadanos esta recibiendo presiones por tierra, mar y aire".
La Razón nos trae otra encuesta. "El 80% de los españoles exige a los políticos que no tomen vacaciones hasta que haya gobierno". Castigados. Por supuesto, su encuesta les dice que la mayoría "cree que el Partido Socialista debería favorecer la investidura de Rajoy mediante la abstención y que Ciudadanos debería dar un voto afirmativo". ¿Se habrá hecho la encuesta Marhuenda él solito? La Razón centra la presión sobre Sánchez. "Son mayoría quienes responsabilizan directamente al PSOE de que mantenga esta situación". Parece que el PP ha repartido presiones entre sus dos periódicos de cabecera.
Y La Vanguardia nos cuenta que "el líder de Podemos está triste". Dice Fernando García que "ya no es el de antes", que habla "en voz baja hasta el límite de lo audible y con síntomas como de astenia veraniega". "En tiempos no lejanos respondía a todas la preguntas con respuestas puntiagudas y sonrisas de compasión. Se sentaba repanchingado colgando el brazo del respaldo de la silla y hacía ese gesto tan suyo de abrir los brazos con las palmas hacia arriba, mientras, con la frente fruncida, negaba con la cabeza ante lo que acababan de decir o hacer, pobrecillos, Rajoy, Sánchez o Rivera". Sí, aquel prepotente engreído, todos nos acordamos. Pero ahora está "tristón y desganado (…) El Iglesias combativo y altanero de las grandes noches en el ring del plató, de las tardes triunfales en el mitin con lleno hasta la bandera y de las mañanas con rueda de prensa bomba que a todos cogen con el pie cambiado…., ese Iglesias, está desparecido. Algo noqueado por los último golpes, el campeón está abatido". La princesa está triste, qué tendrá la princesa, los suspiros se escapan de su boca de fresa. Bocaza, mejor.