Era su primera opción y la más dramática. Adelantada por Libertad Digital hace dos semanas, la vía de hacer dimitir a la mitad más uno de la Ejecutiva, para constituir automáticamente una comisión gestora al frente del PSOE, había quedado en un segundo plano tras el órdago de Pedro Sánchez. Pero la opción ha cobrado fuerza en las últimas horas y en todos los círculos socialistas se preguntan, y muchos afirman, que "no llegamos al Comité federal" del sábado 1 de octubre.
De los 35 miembros de la Ejecutiva Federal, los críticos necesitan 18 y les faltaban tres, pero en las últimas horas aseguran que "ya los tenemos" y proclaman de viva voz haber "captado" a los sanchistas que les faltaban, entre quienes ubican a quienes tenían dudas, como el secretario ejecutivo, Patxi López, y la socialista valenciana, Carmen Montón.
La dirección lo niega tajante y apuntan a movimientos del secretario general, Pedro Sánchez, que aseguran hará esta mañana un gesto: un llamamiento a los cobardes para que "no esperen a tener la mitad más uno" y que "dimitan si no respaldan ya la línea del secretario general del partido".
Una virulencia hasta ahora desconocida en la guerra abierta por el liderazgo en el PSOE que ha subido varios decibelios tras las palabras del expresidente, Felipe González, en la cadena SER.
El empate de la Ejecutiva
Al margen de la victoria que proclaman los críticos, en la composición del órgano de la Ejecutiva Federal hay un empate muy ajustado. Los nombres y su ubicación según "los bandos" de los que ya habla abiertamente Pedro Sánchez es la siguiente:
- Micaela Navarro, presidenta del PSOE. No quiere sangre pero votará con los críticos.
- Pedro Sánchez, secretario general. Huelga comentario.
- César Luena, secretario de Organización. Oficialista.
- Antonio Pradas, secretario de Política Federal. Hombre fuerte de Susana Díaz. Crítico.
- Carmen Montón, secretaria de Igualdad. Es la gran duda. Ambas partes se la atribuyen.
- Patxi López, secretario de Acción Política. Oficialista, pero los críticos esperan que cambio con la intervención de los tótems del PSOE, incluido Rubalcaba.
- Ximo Puig, secretario de Reformas Democráticas. Susanista fiel.
- Adriana Lastra, secretaria de Política Municipal. Oficialista fiel; contraria a Javier Fernández.
- Manuel de la Rocha, secretario de Economía. Oficialista. "No me verán en la guerra".
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María José Sánchez Rubio. Crítica
- Mº Luz Rodríguez, secretaria de Empleo. Más crítica.
- María Glez. Veracruz, secretaria de Ciencia y participación. Oficialista.
- Meritxell Batet, secretaria de Estudios y Programas. Una de las más cercanas a Sánchez.
- Carmen Chacón, secretaria de Política Internacional. Pide "despertar" de la era Sánchez.
- Estefanía Gómez Palop, secretaria de formación. Susanista a ultranza.
- Pilar Lucio, secretaria de Cambio Climático y Sostenibilidad. Sanchista y contra Vara.
- Susana Sumelzo, secretaria de Administraciones Públicas. Sánchista y contra Lambán.
- Iratxe García, secretaria de la Unión Europea. Sanchista y contraria a los críticos.
- Mª Luisa Faneca, secretaria de Agricultura y Pesca. Casi la única sanchista andaluza.
- José Miguel Pérez, secretario de Educación. Crítico canario y "muy cabreado" con Ferraz.
- María Luisa Carcedo, secretaria de Bienestar Social. Oficialista y gran defensora de Sánchez.
- Ibán garcía del Blanco, secretario de Cultura. Oficialista.
- Roberto Jiménez, secretario de Emigración. Oficialista navarro.
- Noemí cruz, secretaria de cooperación para el Desarrollo. Crítica.
- Manuela Galiano, secretaria de pequeños Municipios. Crítica andaluza.
- Eva Matarín, secretaria de Inmigración. Crítica madrileña y tomasista.