En pleno afán por mantener el control de las voces críticas y tras desvelarse una grabación en la que la cúpula morada en Baleares ofrecía a Carmen Azpelicueta un puesto de trabajo a cambio de que fuese "buena niña" y desapareciese durante unos meses, el Consejo de Coordinación Autonómico ha ordenado finalmente que Azpelicueta quede suspendida de forma cautelar como miembro del Consejo Ciudadano Autonómico, según ha publicado El Mundo.
Sin embargo, Podemos todavía no ha tomado ninguna decisión sobre Pascual Ribot, presidente del Comité de Garantías y una de las personas que aparece en la grabación junto al recién dimitido Juan Canyelles chantajeando a Azpelicueta.
La decisión ha sido adoptada por el Consejo de Coordinación y no por el Consejo Ciudadano, que es el órgano que realiza las funciones de ejecutiva. El artífice de esta carambola ha sido el secretario de organización estatal de Podemos, Pablo Echenique, que el pasado jueves ordenó que el Consejo Ciudadano Autonómico conformado por 19 personas, varias de ellas pertenecientes al sector crítico, pasase a un segundo plano y otorgó todo el poder para tomar decisiones al Consejo de Coordinación, compuesto por siete personas controladas por el líder regional Alberto Jarabo, leal al sector de Pablo Iglesias.
Según relata El Mundo, la dirección de Podemos acordó suspender a Azpelicueta cautelarmente «hasta que este tema sea investigado y resuelto» por la dirección estatal de Podemos, según publicó ayer el partido en su sistema interno de comunicación de Telegram. Azpelicueta no ha recibido todavía ninguna comunicación oficial sobre su cese como miembro de la dirección del partido y tampoco ha recibido la comunicación por medio de Telegram puesto que ha sido expulsada de la red y no tiene acceso a los mensajes de la dirección.