El coordinador general del Partido Popular de Cataluña (PPC), Xavier García Albiol, estaba de compras por el centro comercial L'illa Diagonal, en la parte alta de Barcelona, cuando un joven dependiente le pidió un selfie. Nada de particular, aunque los dirigentes del PP catalán no están demasiado acostumbrados a que les pidan selfies. García Albiol creyó tener un fan, pero al poco tiempo descubrió que el dependiente había publicado la imagen en las redes para calificar al dirigente político de "subnormal profundo".
Ni corto ni perezoso, García Albiol volvió a la tienda a pedir explicaciones y el caso concluyó con el despido del dependiente.El dirigente popular ha tenido que negar en TV3 que fuera él quien solicitara la fulminante medida disciplinaria, aunque ha precisado que "no me parece lógico que en un negocio se insulte a un cliente". Se acusa a García Albiol de haber acabado con la "carrera" de un joven de 19 años.
