En este caso, las dudas no son únicamente las de la diputada María del Carmen Prieto, sino las de muchos otros militantes de Ciudadanos. La sospecha recae en el conocimiento que la dirección del partido obtiene de los votos que pueden emitir los militantes y cuadros de Ciudadanos en la base.
Como aclaró el responsable de prensa de Ciudadanos, Adrián Enguí, la empresa encargada de estos menesteres es la catalana Monomio Media, SL,empresa de poco más de dos años de antigüedad, cuyo objeto social es "Construcción, Instalaciones y mantenimiento. Comercio al por mayor y menor. Distribución comercial. Importación y exportación. Actividades Inmobiliarias. Actividades profesionales", etc. y de la que es administrador único Raúl Enrique Guillén Alles.
Si bien Fran Hervías, secretario de Organización, dijo que las votaciones estarían certificadas por la Real Casa de la Moneda de tal modo que el organismo de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre recibiría cada voto, emitiría un certificado de cada sufragio, y se lo enviaría tanto al votante como al candidato al que estuviese destinado.
Sin embargo el afiliado de Ciudadanos Antonio Álvarez en un escrito hecho público tras las Asamblea General niega tales garantías, en lo que coinciden los críticos andaluces y afirma además que son "burdas mentiras fácilmente comprobables con una simple llamada a la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre".
Según este informe, "el censo no es fiable ni se permite auditarlo":
- No hay mecanismos para garantizar que un votante vote más de una vez a través de múltiples cuentas.
- No hay ningún mecanismo de autenticación del votante.
- No se garantiza el voto secreto y anónimo.
- No existe un recuento fiable y auditable.
- No se permite ningún control por parte de los candidatos ajenos al Aparato."
María del Carmen Prieto ha afirmado que este es el mecanismo por el que la dirección del partido conoce perfectamente la posición de cada afiliado y militante y que, gracias a este conocimiento, decide su futuro en la organización.
A Marín no le ha gustado que Prieto donase sus dietas
Este pasado mes de agosto María del Carmen Prieto donó sus dietas parlamentarias a Cáritas Andalucía, algo que no ha gustado a la dirección de Ciudadanos ni a Juan Marín. Es más, le ha reprochado que con su comportamiento había dejado en evidencia a su compañero y diputado de Málaga, Carlos Hernández White. Sus palabras exactas, según Prieto, fueron que había asestado una "puñalada trapera" a su compañero de partido y de provincia.
El tema de las dietas "veraniegas" de los diputados andaluces siempre ha sido muy controvertido porque se generan cuando no hay trabajo en el Parlamento. Prieto había anunciado públicamente que donaría sus dietas de agosto a una ONG.
La importancia nacional de la crisis de Ciudadanos
Susana Díaz depende esencialmente de tres apoyos para poder alcanzar la secretaría general en Ferraz. El primero, es el apoyo de las diferentes baronías de su propio partido a nivel federal. El segundo, el apoyo de algunos barones regionales claves, como Paco Reyes, secretario general del PSOE de Jaén, sin el cual no sería posible su liderazgo andaluz. Y el tercero es el apoyo de Juan Marín y Ciudadanos en Andalucía.
Susana Díaz dispone de 47 votos en el Parlamento andaluz, que completa con los 9 votos que aporta Ciudadanos. Los 56 votos resultantes son suficientes para sustentar una mayoría absoluta holgada que ha funcionado como un rodillo hasta el momento con ligeras excepciones.
Sin embargo, sólo con que dos diputados de Ciudadanos abandonaran la disciplina de su grupo, Susana Díaz perdería la mayoría cómoda que tiene en el Parlamento andaluz y su gobierno se complicaría enormemente.