"España somos tú y yo y el hogar que nos ampara. La tumba de nuestros padres y el jardín de nuestra casa. Y el rojo y gualda que pone ese nudo en la garganta". Con estas frases de un poema de José Luis Santiago de Meras se ha estrenado este martes el nuevo Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), general del Ejército Fernando Alejandre Martínez, que también ha sido ascendido a general de cuatro estrellas.
La toma de posesión del hasta ahora máximo mando español en la estructura de la OTAN ha tenido lugar en el patio del Ministerio de Defensa, donde ha tenido lugar un breve acto castrense en el que ha estado presente toda la cúpula del Ministerio de Defensa, con María Dolores de Cospedal a la cabeza, así como el almirante general Fernando García Sánchez, que es quien ha cedido el testigo en el cargo al general Alejandre.
La nueva cuarta autoridad militar del país -le preceden el Rey, el presidente del Gobierno y la ministra de Defensa- ha dicho que se encuentran ante "el mayor reto de mi vida" y se ha comprometido a "hacer todo lo que esté en mi mano para no defraudar", al tiempo que ha llamado a la unidad de acción de los ejércitos: "solo juntos, unidos, desarrollando al unísono nuestras Fuerzas Armadas, seremos otra vez fuertes y estaremos preparados para defender los intereses nacionales".
En su intervención, en la que no ha tenido ni un recuerdo para el JEMAD saliente pero sí para el último militar de Tierra que ocupó el cargo, el general de Ejército retirado y actual director del CNI Felix Sánz Roldán, se ha marcado como reto la "superación de esquemas obsoletos, la cooperación y colaboración franca entre ejércitos y el Estado Mayor de la Defensa, recuperar la iniciativa y ser leales a la tradición y la patria".
El nuevo JEMAD ha ensalzado los valores castrenses y ha dejado claro los principios por los que se va regir durante los próximos años: "asumo la obligación de mantener vivos conceptos como patria, sacrificio y honor en tiempos difíciles donde la mentira, difamación, falsedad y derrotismo tratan de pervertir principios que aprendimos y hacer que olvidemos la trascendencia de servir a España con todas nuestras fuerzas".
También ha querido destacar la labor que realizan los militares españoles fuera de nuestras fronteras, donde actualmente se encuentran desplegados más de 2.500 efectivos. De ellos, dijo que son "son ejemplo dentro y fuera de nuestras fronteras" y ha asegurado que se encuentran en esas misiones defendiendo los valores de la civilización occidental y los intereses de España.
Por su parte, la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, ha subrayado los importantes retos que el general Alejandre tendrá que asumir al frente del EMAD, y ha destacado su dilatada experiencia, tanto en el ámbito nacional como internacional, donde ha ocupado destinos en la OTAN en operaciones y en cuarteles generales internacionales, "lo que le da un bagaje muy amplio y acorde con las tareas que tendrá que llevar a cabo en su nuevo puesto".
También ha señalado algunos de los retos a los que se enfrenta el nuevo JEMAD, entre los que ha destacado la contrucción y el liderazgo español en la nueva Europa de la Defensa, las amenazas que llegan desde el "flanco sur" (norte de África y Sahel) o la adaptación de las Fuerzas Armadas a los nuevos retos para que "sigan siendo pioneras". "Tus éxitos redundarán en España y en la seguridad de los españoles", ha asegurado.
Por último, ha tenido un momento, al contrario que Alejandre, para agradecer los servicios prestados al JEMAD saliente, de quien ha dicho que "ha realizado un esfuerzo muy importante para la transformación de nuestras FAS y su adaptación a las amenazas permanentes. Ha impulsado la estructura operativa con la creación del Núcleo de Fuerza Conjunta y los Mandos Conjuntos de Vigilancia y Seguridad Marítima, Defensa y Operaciones Aéreas, Ciberdefensa y Operaciones Especiales".