Menú

La renegociación del pacto con Ciudadanos no será un camino de rosas para el PP

Villegas pide redactar de nuevo ese punto para que "todos tengamos claro de qué estamos hablando". 

Villegas pide redactar de nuevo ese punto para que "todos tengamos claro de qué estamos hablando". 
Albert Rivera, durante el desayuno de Europa Press, este martes en Madrid. | EFE

Cobrada la pieza de la dimisión de Pedro Antonio Sánchez, aunque "tarde y mal" como ha dicho el Secretario General de Ciudadanos, José Manuel Villegas, el partido naranja afronta ahora la renegociación del pacto de investidura firmado en 2015 con el PP.

Una nueva negociación que podría modificar la exigencia de dimisión de los cargos públicos imputados, tal y como ha admitido Villegas: "Está claro que ha habido una interpretación cuanto menos diferente, con respecto a ese punto, y por lo tanto, habrá que aclarar algunas cosas, para ver si somos capaces de reconstruir el acuerdo. Algunos puntos como ese, pues habrá que negociarlo por lo menos para que, cuando hablemos de él, todos tengamos claro de qué estamos hablando".

El acuerdo en Murcia, como el que PP y Ciudadanos firmaron a nivel nacional para la investidura de Mariano Rajoy, habla simplemente de apartar a los cargos que estén investigados por la Justicia (la antigua figura de la imputación) por casos de "corrupción política". Durante toda la crisis murciana, el momento exacto en el que alguien estaba o no imputado ha sido objeto de debate entre populares y centristas.

Además, en la Ley Integral contra la corrupción presentada en el Congreso por el propio Rivera el pasado veintiuno de febrero, se establecía la apertura del juicio oral contra alguien como el momento en el que debería renunciar a su cargo. Los populares acusaron entonces reiteradamente al partido naranja de contradecirse, a lo que Ciudadanos contestó distinguiendo entre un compromiso político, como los acuerdos de investidura, y una normal legal, en la que, argumentaban, no se podía dictaminar la retirada de un cargo público investigado por la Justicia.

La bala en la recámara de Ciudadanos

Las palabras desdeñosas con que Pedro Antonio Sánchez se ha despedido de la presidencia autonómica no han sentado nada bien en la delegación murciana del partido naranja. Lejos de asumir responsabilidades por haber faltado a su palabra o de reconocer que la imputación de siete delitos por dos juzgados distintos le obligaba a dimitir, el presidente saliente ha atribuido su decisión exclusivamente a la necesidad de impedir un "Gobierno Tripartito" para la región de Murcia, formado por Ciudadanos, PSOE y Podemos, que a su juicio sería letal para los intereses de los murcianos.

Ciudadanos, que siempre rechazó la referida componenda, se ha visto así incluido en una especie de conspiración izquierdista para expulsar "de manera injusta" al presidente de la región. Sin embargo, lo cierto es que el partido de Rivera podría ir mucho más allá en cumplimiento del acuerdo de investidura firmado el 22 de junio de 2015 con el PP, que facilitó la llegada al poder de Pedro Antonio Sánchez. En concreto, su punto primero establece lo siguiente:

"Separar de inmediato de cualquier cargo, público o de partido, a imputados por corrupción política hasta la resolución completa del procedimiento judicial"

Pedro Antonio Sánchez ha decidido por su cuenta que seguirá como presidente del PP regional y diputado autonómico, sin embargo, el compromiso suscrito en su día con Ciudadanos faculta al partido de Rivera a pedir también su cese en ambas responsabilidades.

De hecho, una de las condiciones para aceptar la investidura del candidato del PP en 2015 fue que Miguel Ángel Cámara, ex alcalde de Murcia y por aquél entonces secretario general del PP, dimitiera como secretario general del partido por estar imputado en dos causas judiciales. Al partido naranja no le bastó que ya estuviera fuera de la política institucional y exigió también su abandono de las responsabilidades orgánicas, lo que acabó ocurriendo pocos días después.

Si hiciera otro tanto ahora -con más motivo, puesto que el presidente dimitido ostentará no uno, sino dos cargos políticos-, la investidura del sucesor designado por el PP podría encontrar serios escollos que tendrían que resolverse en una nueva negociación.

Sea como fuere, la sucesión de Pedro Antonio Sánchez no es un proceso automático que decidan en solitario en el PP. Por el contrario, para saldar con éxito este recambio al frente de la comunidad autónoma, los populares tendrán que ganarse nuevamente el apoyo del partido de Rivera, que a partir de ahora podrá tensar la cuerda tanto como estime conveniente. No parece que los ataques constantes de dirigentes populares hacia los responsables de Ciudadanos sean un buen comienzo para garantizar una investidura sin sobresaltos, que permita al PP seguir gobernando en Murcia lo que resta de legislatura.

Rivera culpa a Rajoy de "proteger a los imputados"

Para Albert Rivera, que se pronunciaba en un desayuno informativo de Europa Press en Madrid antes de que se concretase la dimisión del presidente murciano, el PP ha tardado cuarenta y cinco días –los que han transcurrido desde la imputación del presidente murciano, Pedro Antonio Sánchez, por el caso Auditorio– en resolver lo que podría haberse arreglado "en quince minutos".

Rivera ha señalado directamente a Mariano Rajoy como responsable de la situación creada: "Es el responsable de la crisis, si no la soluciona. Le pido a Mariano Rajoy, o a Maillo, o a quien envíe, que cumpla el acuerdo, que se marche el presidente de Murcia, que le van a caer ya siete delitos de corrupción política, imputado, si va adelante lo de la Púnica, y que se acabe esta historia". El líder centrista no ha dudado en acusar al jefe del Ejecutivo de connivencia con la corrupción: "Siempre protege a los imputados, en luchar de echarlos. No sé qué sabrá el señor Sánchez, para que le protejan cuarenta y cinco días, en vez de pedirle que cumpla el acuerdo".

"Con Rajoy no hablo de temas regionales"

Tras sus duras críticas al presidente del Gobierno, el moderador del coloquio le ha preguntado a Rivera si se les ha trasladado en privado. El líder de Ciudadanos ha dicho que no es algo que hable con el líder del PP: "Por responsabilidad, con el señor Rajoy hablo de asuntos de Estado, como los Presupuestos, como el recurso ante el Tribunal Constitucional por el referéndum en el presupuesto de Cataluña, del déficit europeo, de los asuntos internacionales, pero evidentemente, de los temas regionales y demás que afectan a los partidos lo delego, en este caso, en nuestro secretario general, y me consta que él hace lo mismo con Maillo".

Temas

En España

    0
    comentarios