Ciudadanos realizará una "abstención técnica" en la segunda votación de la investidura en la Asamblea de Cartagena -el debate comienza este jueves- con la que Fernando López Miras podrá sustituir al dimitido Pedro Antonio Sánchez como presidente de Murcia.
Así lo ha anunciado el líder naranja murciano, Miguel Sánchez, este martes, tras decir que no hay posibilidad de reeditar el acuerdo de investidura suscrito en 2015 con los populares, ya que, a su juicio, "no son creíbles" en materia de regeneración. "No habrá acuerdo de investidura" ha sentenciado Sánchez, confirmando lo que el lunes publicaba Libertad Digital.
Una negociación fallida
Ciudadanos y populares se intercambiaron sus propuestas iniciales, con muchos puntos en común en asuntos como la rebaja de impuestos, las soluciones al problema de la falta de agua o la culminación de infraestructuras básicas como el aeropuerto internacional, el Corredor Mediterráneo de mercancías y la llegada del Tren de Alta Velocidad.
El único punto de fricción estaba en el tratamiento político de los casos de presunta corrupción, que llevaron a la dimisión del presidente popular Pedro Antonio Sánchez. Ciudadanos pedía que Sánchez abandonara también su acta de diputado y, sobre todo, la eliminación del aforamiento de los 45 diputados regionales, una medida, por cierto, que el propio ex presidente propuso en su discurso de investidura en junio de 2015. Este lunes, después de la reunión de la Ejecutiva nacional de Ciudadanos, el secretario general de la formación, José Manuel Villegas, reiteraba su exigencia sobre Sánchez: "Si se nos pregunta creemos que Pedro Antonio Sánchez no debería mantener su acta".
El escollo de los aforados
Desde el principio, la supresión del aforamiento para los diputados autonómicos y los miembros del Gobierno murciano era una condición sine qua non para Ciudadanos. Finalmente, el PP permitirá con su voto que esa reforma del Estatuto autonómico salga este miércoles adelante, pese a que no aceptar el resto de grupo su enmienda para preservar el aforamiento para los consejeros y el presidente del Gobierno.
Pero ni siquiera ese paso ha facilitado un sí de Ciudadanos, que pide como condición para su abstención que López Miras se comprometa en su discurso del jueves, al inicio del debate de investidura, con la supresión de los aforados, que se habrá votado un día antes, y con las enmiendas de Ciudadanos a los presupuestos de la región.
Pese a todo, se trata de una reforma estatutaria y, como tal, debe ser ratificada por las Cortes Generales. Ahí puede tener el PP la última palabra, dada su mayoría en el Congreso y el Senado. La supresión de los aforados se incluye también en el acuerdo de investidura de Mariano Rajoy, aunque los miembros del Ejecutivo han dado reiteradas largas a Albert Rivera, quien pretendía llevar a cabo una reforma exprés de la Constitución en este punto.