El subdelegado del Gobierno en Álava entre los años 1999 y 2004 y exjefe de la Policía Local de Logroño, César Velasco Arsuaga, falleció ayer martes a los 65 años debido a una parada cardiorrespiratoria en los alrededores del refugio del Teide, en Tenerife, según han confirmado a Efe fuentes del Partido Popular.
Sobre las 15:30 horas, el 112 de Canarias movilizó un equipo médico en helicóptero para intentar socorrer a Velasco Arsuaga, que en esos momentos se encontraba en los alrededores del refugio de Altavista, situado a casi 3.300 metros de altitud. Sin embargo, los sanitarios no pudieron hacer nada por salvar al político vasco, al que se encontraron en parada irreversible.
Nacido en Amurrio (Álava) y arquitecto técnico de profesión, Velasco Arsuaga cobró notoriedad durante sus años como representante del Gobierno de España en Álava por los recursos que interpuso para exigir que se respetasen los símbolos nacionales en varios ayuntamientos de la provincia y en destacadas instituciones, como el Parlamento vasco o las Juntas Generales de Guipúzcoa.
Entre otros, promovió los recursos por los que el Tribunal Supremo sentenció que la bandera de España debía ondear en la Academia de la Ertzaintza en Arkaute (Álava), junto con la ikurriña, y que los policías autonómicos vascos debían jurar la Constitución. Arquitecto técnico de profesión, Velasco Arsuaga trabajó durante veinte años en el Ayuntamiento de Logroño, donde llegó a ser jefe de la policía municipal.
Su salto a la política se produjo en los años noventa, cuando se presentó a las elecciones municipales de Amurrio por el PP. No consiguió ser elegido entonces concejal en su localidad, pero sí logró un escaño de procurador en las Juntas Generales de Álava, que ocupó hasta su designación como subdelegado del Gobierno.