El dramaturgo, actor y escritor, Albert Boadella, sigue sintiendo vergüenza de ser catalán y admite que es bastante pesimista con respecto a la deriva secesionista. En una entrevista que publica La Razón este domingo, asegura que "la estructura está montada desde el tiempo de Jordi Pujol" para fomentar el odio hacia el resto de España a través de una ficción fomentada por la televisión autonómica y la educación, que ha difundido la idea de una "España goyesca, intolerante, dominante y negra".
Por ese motivo, asegura Boadella, una de las cosas que podría hacer reaccionar a la población es una importante bajada de Cataluña (y también de España) desde el punto de vista económico: "Que sufra la economía y el ciudadano lo note en su bolsillo es un escarmiento duro desde luego, pero que puede funcionar".
Con respecto al resultado electoral, Boadella ve difícil que el bloque constitucionalista gane en escaños, pero sí en votos, al bloque independentista y reconoce que se alegraría de ver a la candidata de Ciudadanos, Inés Arrimadas, como presidenta de la Generalidad.
El actor también se ha referido al culebrón belga del expresidente Carles Puigdemont, que califica de "espectáculo deprimente", no sólo por las numerosas comparecencias de Puigdemont ante la prensa para ofrecer titulares, sino también por "aquellos que se van a Bruselas a ver a un capullo nacionalista que se cree Guillermo de Orange".
Boadella arremete también contra el candidato del PSC a la Generalidad, Miquel Iceta, al que acusa de jugar con el electorado y esgrimir el discurso de que hay que ser buenos: "A los de la puntita nada más, los temo. Es más, los aborrezco". A diferencia de Junqueras y Puigdemont, dice el actor, que "han engañado durante años y ahora se han quitado la careta", los PSC "no sabemos por dónde la van a meter".
Cuando le preguntan por la posibilidad de un nuevo "menage a trois" tras el 21D, Boadella afirma que desconfía de los tripartidos montados por la izquierda porque que la unión entre Maragall, Esquerra y después Montilla fue "una muy mala experiencia".