Menú

El Rey, muy desmejorado en la Cumbre Iberoamericana

Durante la Cumbre Iberoamericana, se ha visto al Rey muy desmejorado.

El Rey ofreció una imagen desmejorada en la Cumbre Iberomericana nunca antes vista. Desde primera hora de la mañana su agenda fue muy intensa, y con el paso de las horas se le vio más cansado y más dolorido. Al principio, requirió de una muleta para aguantar de pie y estrechar la mano a los mandatarios que fueron a saludarle al Parador de Cádiz, su base de operaciones. "Aquí me tienes, un poco tullido, pero bien", le decía a Juan Manuel Santos, presidente de Colombia, que nada más verle le abordaba por su estado de salud.

Tras Santos, le visitó Rafael Correa, jefe del Ejecutivo de Ecuador. De nuevo, misma pregunta sobre su estado: "Aguantando, pero bien", le dijo. El invitado incluso hizo amago de ayudarle a sentarse al verle tan incapacitado. Después, mantuvo un almuerzo con Felipe Calderón (México) y Mariano Rajoy, y pudo reponerse un poco.

Sin embargo, lo peor aún estaba por llegar. El mayor esfuerzo se produjo en la recepción que presidió en el Oratorio San Felipe Neri, cuna de La Pepa. Fueron unos largos minutos en el que el monarca pareció angustiado, separado del resto del grupo -a su izquierda, la Reina, y tras ella los Príncipes y demás autoridades-, dando muestras de fatiga. Si no tenía que estrechar la mano o besar a las primeras damas invitadas, requería una su segunda muleta. Si tenía que dar unos escasos pasos para la fotografía de familia o sentarse, también solicitaba esa ayuda. No hubo descanso.

Tras el trance -que intentó pasar despachando campechano con los invitados-, la comitiva se trasladó al Teatro Falla de la ciudad, donde pronunció su primer discurso: "Españoles y americanos demostramos cómo trabajando y soñando juntos podemos alcanzar metas de extraordinaria relevancia para el progreso de nuestras sociedades que, además, sirven de inspiración a otras latitudes".

Previamente tomó la palabra el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para reclamar más unidad en tiempos de crisis, si bien no hizo ninguna mención expresa a Cataluña. Se espera que a las nueve y diez de la noche, según el programa, arranque la cena de gala ofrecida por el Rey. Hay mucha expectación porque Zarzuela asegura que dirá algo más allá al discurso del brindis redactado por su equipo de comunicación.

Temas

En España

    0
    comentarios