Menú

Alonso y Quiroga, favoritos para suceder a Basagoiti al frente del PP vasco

Basagoiti se vio con Rajoy la pasada semana en Moncloa para comunicarle que se marcha. Ahora busca un candidato de consenso: tiene cuatro nombres.

Basagoiti se vio con Rajoy la pasada semana en Moncloa para comunicarle que se marcha. Ahora busca un candidato de consenso: tiene cuatro nombres.
Alonso, Quiroga, Sémper y Oyarzábal, los cuatro candidatos el liza.

Su renuncia, aseguran, es definitiva. Deja la política para dar el salto a la empresa privada. “Me marcho antes de que termine el año”, dijo Antonio Basagoiti a su círculo político más próximo en una reunión secreta la semana pasada. En ella, les marcó su hoja de ruta: primero, convocará una rueda de prensa para hacer el anuncio y poner fecha a un congreso extraordinario y, entre tanto, trabajará con Génova y Moncloa en la búsqueda de un candidato de consenso. No será algo inminente, pero sí antes de que termine 2013.

En dicho encuentro, los suyos le pidieron que aguantara. Al menos, hasta las elecciones locales de mayo de 2015, pero el todavía líder de los populares vascos se escudó en razones “personales”, principalmente “por la familia” para dar por resuelto el asunto: será este mismo año.

Mariano Rajoy ya sabe de su marcha prematura. No quiere que se vaya; confía en él, le escucha en cuestiones clave, como la política contra ETA, y le llama cada vez que despacha con Íñigo Urkullu. Precisamente por ello, en el PP dieron por descontado que era el candidato natural al Ministerio del Interior en caso de una crisis de Gobierno. Están quienes creen que, si finalmente se produce el ofrecimiento, el dirigente vasco retornará a la política activa.

Con el presidente despachó también la semana pasada, cuando se desplazó a la Moncloa. Fue un encuentro cordial y próximo. Tras esa conversación fuera de agenda, Basagoiti se mantuvo en su decisión de marcharse “lejos de España”, a la banca. A renglón seguido, informó a la secretaria general del PP y a otros actores clave de la formación, como la vicepresidenta.

Los candidatos a líder del PP vasco

El melón sobre la sucesión no ha tardado en abrirse. En liza cuatro candidatos. Arantza Quiroga, otrora presidenta del Parlamento vasco y hoy portavoz del Grupo Popular en la Cámara de Vitoria, es una de las favoritas. Su perfil gusta en los círculos de poder; de hecho, formó parte de la quiniela de posibles ministros. Dicen que tiene la capacidad de conciliar el respeto de todas las familias que conforman el PP, a pesar de ser una reconocida católica de firme convicciones.

Su rival más duro es Alfonso Alonso, portavoz de los populares en el Congreso de los Diputados. Íntimo de la vicepresidenta, de su equipo de máxima confianza, es también miembro de la dirección nacional. Así, a pesar de ser un reconocido “sorayo”, su relación con María Dolores de Cospedal es “la correcta, muy buena”, inciden desde la Secretaría General. Ese perfil de consenso le hace ganar muchos enteros a pesar de que él mismo asegura que no quiere dejar Madrid. “A voz de pronto, es el mejor candidato”, reconocen fuentes de la cúpula nacional.

En un segundo escalón se encuentran dos hombres de la guardia política de Basagoiti. Por un lado, Iñaki Oyarzábal, su eterno número dos que recientemente dio el salto a Génova13 en calidad de secretario de Justicia, Derechos y Libertades del PP. Este cargo es de especial relevancia -antes lo ostentaba Federico Trillo- y aborda asuntos clave para el PP, que van desde la lucha antiterrorista al aborto. Su candidatura, en todo caso, tiene sombras: está enfrentado a sectores de su propio partido -sus encontronazos con Jaime Mayor Oreja han sido públicos- y no cuenta con el cariño de una parte de la bases por algunas de sus declaraciones.

El cuarto futurible se llama Borja Sémper, presidente del PP de Guipúzcoa que, poco a poco, se ha ido haciendo más conocido en la política a nivel nacional. Aunque ya ha afirmado que no está ni estará “en movimiento internos para ser presidente”, en el PP creen que está “trabajando” para hacerse un hueco. Como Oyarzábal, algunos comentarios le han valido para ganarse las críticas: “El futuro de Euskadi se tiene que construir también con Bildu”, llegó a decir, indignando a las víctimas. En las últimas fechas, su firmeza precisamente contra la formación proetarra en la Cámara vasca le ha valido el elogio de dicho colectivo. Para Génova, “es querido por nosotros y muy válido y trabajador, pero reconocemos que fuera del País Vasco no es conocido. Tal vez le falte todavía recorrido para un puesto de tal envergadura y que tiene tanta repercusión a nivel nacional. En todo caso, es muy pronto y podría tener opciones”, en voz de un miembro de la citada cúpula.

Basagoiti calla ante la carrera sucesoria que ahora se abre. “No hay ninguna novedad”, contestó este mismo lunes a las puertas de Génova, con el rumor de su adiós definitivo ya en boca de todos. Su objetivo es lograr un candidato de consenso y que nadie saque el pie del tiesto, aunque todos los consultados descartan que se pueda revivir algo parecido a la traumática salida de María San Gil. “Yo estoy convencido de que Rajoy intentará que no se vaya. Sería una pena. Le veía en el Consejo de Ministros”, afirmaba recientemente un miembro del gabinete. “La familia pesa más que todo eso”, zanja el entorno del todavía líder del PP vasco.

Temas

En España

    0
    comentarios