Rajoy: "Puede haber más de tres partidos" pero "somos los primeros"

Mariano Rajoy quiso mostrarse impertérrito ante aquellas cuestiones que alteran, y mucho, a su partido. Sobre Cataluña, tranquilizó asegurando que todos los escenarios están previstos y prometió que la consulta no se va a celebrar. En clave electoral, admitió una posible horquilla parlamentaria con más partidos pero "somos los primeros". Y en el asunto de las candidaturas, tal vez la que genere más nerviosismo interno hoy por hoy, proclamó que no hay "ninguna prisa" y "haremos lo que nos convenga".

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En síntesis, el jefe del Ejecutivo volvió a reivindicar su sello político al inicio de un decisivo curso político y en víspera de comicios locales, autonómicos y locales. "Elijamos el campo de juego, que para el PP es el relato económico", les instó por enésima vez. Esta vez, incluso pidió a los suyos que eviten los tradicionales "off the record" con los periodistas -conversaciones informales- para no alimentar el ruido político. Muchos de los asistentes lo relacionaron con el baile de nombres en las plazas electorales donde existen dudas.

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Rajoy, consciente de la expectación interna y externa, no dudó en abordar el panorama electoral desde el inicio de su intervención. "Hay un cambio, puede haber muchos más de tres partidos", reconoció, en relación a Podemos o Ciudadanos -siglas que, en todo caso, no mentó-. Si bien, aseveró que el PP está logrando mantenerse, y de ahí que sigan los primeros en las encuestas internas y públicas: "perdemos los votos por la abstención, por el voto en blanco, por los que no saben o no contestan". Esto es, "no" se van a otra formación política. "Somos los primeros pero se trata de hacer las cosas bien", hizo a modo de resumen.

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Minutos después, en rueda de prensa, Carlos Floriano rechazó que el PP esté preocupado por Podemos -que tampoco citó- al tiempo que sacó pecho por recuperar la confianza de los españoles "minuto a minuto". El número tres de Génova no aclaró si tienen una estrategia para contrarresta el efecto de Pablo Iglesias -ésa fue la pregunta concreta- y afirmó que lo importante es seguir tomando decisiones y ser los garantes de la "estabilidad". En la pasada escuela de verano de la formación, Esperanza Aguirre llamó a dar la batalla: "hay que desenmascarar a sus dirigentes", se reitera hoy desde el feudo madrileño.

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Los nervios de los barones

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En todo caso, existe nerviosismo interno. Antes de arrancar el Comité Ejecutivo -de nuevo, con pocos barones autonómicos en la sala- algunos cargos con cierto peso insistían en la necesidad de tomar de decisiones lo antes posible. La mayoría se refería a las candidaturas pendientes: "tenemos que saber ya el nombre para ponernos a trabajar. No podemos perder un minuto". Rajoy, sin embargo, quiso alejar la posibilidad de un anuncio inminente: "el plazo para fijar candidatos lo marca la ley". En otras palabras, hasta mayo queda mucho tiempo.

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Las fuentes consultadas de la dirección nacional recalcan que, pese a lo dicho, esperan tener solucionada la espinosa cuestión antes de que termine el año. Pero el presidente insistió en que "no hay ninguna prisa" y "haremos lo que nos convenga". Aguirre, presente en la reunión, no tomó la palabra. Tampoco ningún dirigente invitado. A las puertas de Génova13, la líder del PP madrileño sí respondió a los periodistas: "en política siempre he estado en manos de la providencia, y no me ha ido mal".

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Floriano intentó escurrir el bulto una y otra vez, aunque en el caso de Madrid quiso poner el énfasis en que Ana Botella no está descartada por la dirección: "tenemos muchos candidatos para Madridempezando por su alcaldesa". "No es el momento", resumió, pese a que este diario desveló el encuentro de Rajoy con Aguirre en verano para hablar, precisamente, de esta cuestión. La elección se hará por fases y se anunció formalmente una convención naciona para enero.

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Las medidas contra Mas

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La economía y un aviso muy claro a los barones sobre el déficit públicoocuparon buena parte del discurso del presidente -que fue breve, de poco más de media hora-, aunque también reiteró su postura sobre eldesafío separatista. Sus palabras sobre esta cuestión, a tres días de la celebración e la Diada, rápidamente ocuparon las portadas de los medios digitales: el Ejecutivo tiene preparadas "todas las medidas que hay que tomar si alguien pretende celebrar una consulta ilegal".

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Rajoy no especificó cuales son esas medidas y Floriano únicamente se refirió a los recursos que el Gobierno presentará ante el Tribunal Constitucional una vez Artur Mas convoque el referéndum, cosa que se da por descontado. Una vez ocurra esto, las fuentes consultadas creen que la Generalidad dará un paso atrás pero "todo está estudiado", en voz de un ministro implicado.

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"Siempre hemos dicho lo mismo: el referéndum no se va a celebrar", zanjó el presidente en la reunión a puerta cerrada, en la que no citó la posible alianza de los partidos constitucionalistas. Según pudo saber este diario, Alicia Sánchez Camacho insistirá en esta cuestión en el Parlamento regional, aunque alberga escasas esperanzas. Floriano fue muy crítico con el PSC por su "equidistancia".

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El presidente, que se mostró confiado en que la comisaría de Miguel Arias Cañete será de peso -nada dijo de las opciones de Luis de Guindos, que aspira al Eurogrupo-, también se refirió a la planteada reforma electoral aunque no hizo bandera de esta cuestión como sí en otras ocasiones. "Es muy complicado", admitió, pese a que se mostró deseoso de negociar. Y evitó dar detalles de sus planes: "hay que hacer las cosas bien y no hay que hacer las cosas mal", dijo, según la versión de un cargo consultado.

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