Apenas cinco meses después de haber sido elegido secretario general del PSOE, Pedro Sánchez sufre ya su primera oleada de críticos, liderada, nada más y nada menos, que por su mentora Susana Díaz. La baronesa del PSOE que le aupó a la secretaría general para frenar la opción de Eduardo Madina se alía ahora con el ex candidato para minar el liderazgo de Pedro Sánchez.
Pero la respuesta del primer secretario general del PSOE elegido por la militancia del partido es contundente hacia quienes se reúnen en secreto en Sevilla. "Aquel compañero o compañera que se considere capacitado para concurrir a ese proceso de primarias, tendrá la libertad de hacerlo".
Una invitación de Sánchez, a "aquel compañero o compañera" que lleva dos destinatarios velados, aunque no quiera pronunciar sus nombres ni pronunciarse sobre sus reuniones secretas en la capital andaluza. "Hay muchísimas cosas de las que hablar que son mucho más importantes que ese tipo de cuestiones", dijo al ser preguntado por Libertad Digital. "Yo estoy en el problema de los ciudadanos, en hacer oposición al PP... de lo que estamos hablando es de defender al ciudadano, al usuario, a la pequeña y mediana empresa, y es ahí donde yo creo que nos exige el ciudadano que el PSOE esté".
Recordó Sánchez que "yo ya dije que me iba a presentar a las primarias" que, "afortunadamente" serán primarias abiertas a los simpatizantes del PSOE. Y aclaró que "hablo con todos los secretarios generales casi a diario" y que se siente "absolutamente" respaldado por Susana Díaz.
"A mí me eligieron para hablar de los problemas de la gente... a mí, en líos internos no me van a ver", insistió.