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Rajoy promete dar la batalla contra el terrorismo pero olvida a Ortega Lara

"Si aquellos que vienen no quieren integrarse no podrán estar aquí, habrá que expulsarlos o decirles que no pueden venir", avisa Ignacio González.

Mariano Rajoy prometió que España "está haciendo sus deberes" contra el terrorismo y avisó, frente a quienes hablan de recortes de derechos, de que "seguridad y libertad avanzan y retroceden de la mano" y hay que estar preparados ante la amenaza. "Ningún fanatismo va a poner en peligro nuestras libertades", subrayó el jefe del Ejecutivo en la Casa de América de Madrid.

Durante dos días, la seguridad ha centrado la actividad del partido en el poder. Así, Esperanza Aguirre puso el acento en los "tontos útiles" que descalifican a quienes garantizan la seguridad acusándoles de "autoritarios". E Ignacio González, que como Aguirre está a la espera de la designación de candidatos, reclamó que no existan titubeos ante los inmigrantes radicales: "si aquellos que vienen no quieren integrarse no podrán estar aquí, habrá que expulsarlos o decirles que no pueden venir", afirmó en presencia de Rajoy.

Por su puesto, el presidente no fue tan lejos como Aguirre y González en su breve intervención, centrada en defender los valores de la democracia y en recalcar que España es un país seguro que se puede visitar sin temores. De hecho, mentó la histórica cifra de turistas de 2014 para apuntalar que "saben que al salir de la puerta de su hotel, España es sinónimo de tranquilidad". "Es verdad que pueden suceder cosas que nunca nos gustarían, pero nuestro país siempre dará la batalla de la seguridad y la libertad", se reafirmó, no sin recalcar que esa seguridad también se vive desde el punto de vista jurídico.

No hubo anuncios importantes. El presidente se felicitó por la Ley Orgánica de Seguridad Nacional -de la que, en la víspera, sacó pecho Jorge Moragas, su jefe de gabinete y clave en la redacción del proyecto-y confeccionó un discurso marcado por las generalidades. "Sólo hay una actitud admisible contra el terrorismo: luchar contra él sin cuartel y a través de la unidad y la colaboración a todos los niveles", aseguró. Un extremo que, recalcó, actualmente existe con PSOE y PP trabajando codo con codo tras anunciar un pacto de Estado, de momento, sin medidas cerradas.

Se 'olvida' de Ortega Lara

Rajoy dedicó un capítulo aparte al terrorismo de ETA: "los españoles sabemos tristemente muy bien lo que es el terrorismo, pero no nos ha vencido ni ha podido con nosotros", destacó. A su juicio, la sociedad no contempló "ningún escenario distinto" a la erradicación de la banda "sin condiciones". En palabras de Jorge Fernández Díaz, el titular de Interior, ETA "es un cadáver pendiente del certificado de defunción", que es su disolución.

También tuvo una mención para las víctimas. "No hay mayor aliento moral", precisó, pese a que su relación con este colectivo es peor que nunca, y de ahí que en fechas próximas vuelvan a salir a la calle reclamando firmeza contra la banda. Nada dijo de José Antonio Ortega Lara, en el aniversario de su secuestro -el 17 de enero de 1996- y un día después del fallecimiento en libertad de su carcelero, Jesús María Uribetxeberria Bolinaga. Además de Jaime Mayor Oreja en esRadio, únicamente Ignacio Cosidó, el director general de la Policía, se ha acordado de Ortega: "Hoy mi pensamiento y mi corazón están con él", proclamó desde Palencia el viernes.

En todo caso, Rajoy se comprometió a dar la batalla contra el terrorismo sin descanso. "Viviremos momentos difíciles pero la victoria estará siempre del lado de la democracia", proclamó ante el aplauso de los suyos. "Estamos movilizados para asegurar y defender la libertad", insistió sin dejar de mencionar los terribles sucesos acaecidos en París.

Para el presidente, la respuesta contra el terrorismo no va en contra del "respeto y la tolerancia", recogidos en la Constitución. Todo lo contrario: "es una de las señas de identidad de las que debemos sentirnos orgullosos", y en especial -dijo-quienes forman parte de la familia del PP. "Estaremos a la altura. Los principios y libertades resultan ser nuestra seña y nos mantenemos fieles a ella contra viento y marea". Y es que, avisó, "la democracia tiene temibles enemigos" pero "nunca arriaremos la bandera de la libertad ni tampoco la de la seguridad".

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