Mariano Rajoy asume que el tiempo de las mayorías absolutas ha quedado atrás e, inmediatamente después de las elecciones de mayo, empezarán las negociaciones para alcanzar pactos de gobierno. "No tiene sentido hacer elucubraciones, pero los grandes acuerdos se buscan con el otro gran partido de España", afirmó en una reciente entrevista, en relación al PSOE. Si bien, sus barones y alcaldes al partido que miran es a Ciudadanos, hasta el punto de que algunos ya han iniciado cierto coqueteo y contactos discretos.
Los líderes autonómicos y locales del PP han transmitido internamente que pactar con los de Albert Rivera se puede convertir en su única oportunidad para mantener el poder, habida cuenta de que las encuestas dibujan que no tienen atada la mayoría absoluta prácticamente en ningún territorio. "Somos la primera fuerza, pero no conseguimos la absoluta", repiten los barones en privado. "Yo creo que con Ciudadanos sí que sumamos", añaden quienes no paran de hacer cálculos. Así lo piensan, por ejemplo, en plazas tan importantes como Madrid, Valencia, Islas Baleares o Extremadura.
A tenor de este panorama, y aunque no se resisten a seguir criticando a Ciudadanos en actos sectoriales y mítines, la dirección nacional se ha plegado a sus barones y a la realidad electoral que dibujan las encuestas, y ya no cierra la puerta a pactos con Ciudadanos. Si bien, en rueda de prensa, Carlos Floriano pidió a sus líderes que aparquen el debate hasta después de los comicios. "El 25M se abrirá otra etapa", dijo sin medias tintas.
"Hay que trabajar, hacer y crecer", emplazó Floriano, haciendo suyo el lema de campaña, que dio a conocer en la sede nacional. Aunque, ante la insistencia de los periodistas, reconoció que tras los comicios "habrá que estar a las circunstancias que se den". Y, en privado, la dirección reconoce que sería "una locura" cerrar la puerta a acuerdos con Ciudadanos. Algo "en lo que está de acuerdo el presidente aunque Rivera no le guste nada", según precisaron las citadas fuentes.
En este sentido, los barones ya han tomado la delantera. Desde hace semanas, Esperanza Aguirre y Cristina Cifuentes -las candidatas madrileñas- rechazaron hacer uso de los argumentarios de Génova y optaron por elogiar a Rivera y admitir que no sería descabellado el pacto. Otros homólogos regionales también han optado por el acercamiento. "No se trata de no pensar en nosotros sino en la estabilidad, con altura de miras, siendo más estadistas que nunca y pensando a largo plazo. Si hay que llegar acuerdos, hay que prescindir de egos y de ideologías y ponerse a disposición de los ciudadanos", en palabras de José Ramón Bauzá (Baleares) en TVE, que en privado confiesa que no llega a la mayoría absoluta.
"Monago es del PP con rap o sin rap"
La dirección acepta con resignación esta circunstancia, pero pide que éste no sea el foco de atención de aquí a la cita con las urnas. Y ya avisa de que Rajoy no va a renunciar a cargar contra Ciudadanos -por ejemplo, con respecto a su política sobre el AVE- y que hará mucha campaña por todo el territorio nacional. "No se pueden hacer experimentos con el AVE y el empleo de futuro", alertó este mismo jueves Javier Arenas, miembro de la cúpula y próximo al presidente.
Por su parte, Floriano también se esforzó en vender la idea de que todos los barones están detrás de la "marca" PP pese a las declaraciones de Bauzá o el vídeo de José Antonio Monago, en el que esconde las siglas. "Monago es del PP con rap o sin rap. ¿Quién duda de que es del PP? No hay la menor duda", declaró en su comparecencia. Como prueba, anunció que el logo del partido estará en la publicidad electoral de todos los candidatos y la totalidad de barones se hará la foto con Rajoy este sábado en Madrid para presentar oficialmente el programa.