La dirección nacional volvió a mostrar su frustración por el protagonismo de José Manuel García-Margallo en la campaña de las elecciones catalanas. "Es lamentable", afirmó un miembro de la cúpula una vez se confirmó el cara a cara del titular de Exteriores con Oriol Junqueras en la televisión de Godó. El debate se celebrará el día 23, por lo que "sus opiniones personales" serán noticia en la recta final de la campaña, con Mariano Rajoy en Cataluña.
El malestar es palpable en sectores tanto del PP como del Gobierno. "Yo no tenía ni idea, me temo que es por puro protagonismo", corroboraba un segundo integrante del Comité de Dirección. Según las fuentes consultadas, Margallo informó a Xavier García Albiol de que, tras su propuesta de reforma de la Constitución para incluir "el hecho catalán", fue Junqueras quién se puso en contacto con él para proponerle la fórmula televisiva. El ministro quería participar, y el candidato le dijo que no había problema.
"¿Qué otra cosa podía hacer?", recalcan, no obstante, desde el entorno de Albiol, no sin recordar que es "íntimo amigo" del presidente. En las altas esferas del PP catalán tampoco ha gustado la nueva incursión de Margallo: "Nos ha hecho daño, y nos lo va a volver a hacer", según un integrante de la candidatura popular. Antonio Gallego, número tres, ya se mostró muy crítico con el jefe de la diplomacia.
Según los estrategas de Génova, el PP ha visto una mejoría en las encuestas gracias al "gancho" de Albiol y a la firmeza de su discurso. "En Badalona, se llevó a los votantes del PSC y de Ciudadanos", arguyen, y creen que ello se debe a su postura sin ambigüedades sobre la unidad de España. Por eso molestó tanto que Margallo defendiera, en contra de la postura del candidato, una reforma de la Constitución. Y de ahí que, el simple anuncio del cara a cara, ya haya provocado la indignación de no pocos dirigentes.
"El jueves, cuando lo que diga Margallo esté en los periódicos, Rajoy y Albiol estarán haciendo campaña. Él no debe ser el protagonista", insistió, en conversación informal, un miembro de la dirección nacional. "Y, además, ¡es el ministro de Exteriores! Que deje de hablar de cuestiones nacionales". El viernes pasado, Soraya Sáenz de Santamaría llegó a desautorizar al ministro, y recalcó que sus opiniones son personales, que no oficiales.
En esRadio, Andrea Levy contestó con un "no absoluto y rotundo" a la posibilidad de modificar la Carta Magna para beneficiar a Cataluña y rechazó que se pueda entablar, a día de hoy, un diálogo con Mas. "A mí ya no me toman más el pelo", llegó a contestar a Dieter Brandau. En todo caso, preguntada expresamente por el rifirrafe televisado, contestó: "Margallo le va a explicar las cosas muy claras a Junqueras. Le va a pegar un buen repaso".