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Russini: los trajes italianos de Alfonso Rus que estaban hechos en China

Entre los muchos negocios de Alfonso Rus uno de los más llamativos es su firma de trajes italianos… hechos en China.

Entre los muchos negocios de Alfonso Rus uno de los más llamativos es su firma de trajes italianos… hechos en China.
El interior de la tienda de Játiva | Facebook Russini Quality

Este martes fue detenido Alfonso Rus, exalcalde de Játiva, expresidente de la Diputación de Valencia y uno de los hombres más poderosos del PP en una región que era uno de los grandes caladeros de votos de los populares.

Es el epílogo trágico de una historia de éxito en la política –en la que llevaba 32 años- y también en los negocios, en los que al principio se dedicó a la música, luego se hizo promotor de conciertos, pasó al comercio de electrodomésticos y finalmente presidió una mercantil del mueble, además de emprender otros curiosos negocios como su firma de ropa, Stefano Russini, trajes italianos, o de presunto "diseño italiano" para ser exactos, pero fabricados en China.

La razón comercial es Russini Quality SL comercializadora de la ropa Stefano Russini que se compran en Asia. Allí se confeccionan, los trajes, jerseys, camisas y pantalones llegan al polígono L'Estret de Játiva donde hay un almacén desde el que se surte a una tienda en la Avenida Gregorio Molina 9 de Játiva en la que suele estar Bárbara Rus Ricart –hija del exalcalde- al mando del negocio, del que es administradora única de Russini Quality. Como pueden ver, un negocio familiar.

La elección del nombre de la empresa no deja de ser curioso, tal y como comentó en su día Esteban Urreiztieta en la tertulia de Es la Mañana de Federico: Alfonso Rus le desveló cómo había nacido en 2003 su negocio de ropa de vestir para caballeros. Según su relato, Rus les habló de que había decidido importar trajes de hombre desde Asia, pero que estaba pensando cómo comercializarlos en España. Así, decidió que lo haría bajo un nombre italiano. Tenía claro que sería "Russini" por su apellido, "Rus", pero lo de Alfonso no lo tenía claro. Así, para que la pátina transalpina quedase grabada en sus trajes terminó optando por bautizarla como Stefano Russini.

Pero como ya publicase Libertad Digital, Russini Quality SL se ha visto como su propietario en serias dificultades: a mediados del año pasado llevaba seis años sin depositar sus cuentas anuales en el registro, algo que podría acarrearle el cierre de su hoja registral. La última vez que lo hizo fue en 2009 reflejando los resultados de 2008 cuando, según declaró, había ingresado 79.158 euros en ventas. Fue de los peores años. En 2006 y 2007 obtuvo mejores resultados, superando los 100.000 euros, según cifras oficiales recogidas por el registro mercantil.

Según se ha sabido, Rus se encargaba personalmente del negocio siempre que tenía tiempo, pero la única vinculación societaria con Russini es su hija, Bárbara, que aparece como administradora única. Según los datos que emanan del registro tampoco se han caracterizado por una política de contratación de empleados. En el año 2004 tenían un sólo empleado. Posteriormente, durante 2005, 2006 y 2007 figuran dos empleados, uno con contrato indefinido y otro con un contrato eventual.

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