Menú

Rajoy: "Atenderé a Sánchez como se merece, le diré no a su investidura"

Albiol es elegido coordinador general del PPC a la espera de un congreso aún sin fecha. "No habrá tregua", avisa Rajoy a Puigdemont.

Albiol es elegido coordinador general del PPC a la espera de un congreso aún sin fecha. "No habrá tregua", avisa Rajoy a Puigdemont.

Mariano Rajoy se trasladó a Barcelona para lanzar dos mensajes muy claros. Por un lado, avisó a los secesionistas de que no habrá "tregua" pese a estar el Gobierno en funciones y, por otro, instó a Pedro Sánchez a que decida ya a sus compañeros de viaje o tire la toalla. "España no puede estar mucho más tiempo en una situación como ésta", zanjó en la Junta Directiva del PP catalán, en la que Xavier García-Albiol se convirtió en coordinador general a la espera de intentar tomar las riendas de la estructura en un congreso que aún no tiene fecha.

Tanto Albiol como Alicia Sánchez-Camacho, todavía hoy presidenta del PP catalán, mostraron su respaldo Rajoy en un ambiente desangelado, con poco más de un centenar de dirigentes en una sala de hotel que no lograron abarrotar. "Necesitamos políticos con altura y con sentido de Estado como tú", le dijo Camacho. Y, con dicho aval, el líder nacional volvió a poner encima de la mesa su diagnóstico, que ya avisó que es exactamente el mismo que el realizado un día después de las elecciones generales.

Para empezar, Rajoy quiso enfatizar que el Ejecutivo está en funciones pero no el Estado de Derecho. Una advertencia a Carles Puigdemont después de que el Consejo de Ministros fuera una vez más al Tribunal Constitucional para intentar pararle los pies. "No estamos en tregua, el Estado seguirá cumpliendo sus obligaciones", afirmó en un par de ocasiones. "España, por fortuna, es un Estado democrático y todos estamos sometidos a la ley. En caso contrario, estaríamos ante una ley distinta que sería la ley de la selva", arguyó, recibiendo el aplauso de los suyos.

Tras volver a fijar postura sobre la ofensiva separatista, y recalcar que el PP siempre defenderá la Constitución y las leyes, Rajoy se centró en el proceso de investidura. Y, una vez más, ofreció la gran coalición como solución ante la crisis política que atraviesa el país. "Daría un magnífico mensaje económico", sentenció, poniendo la lupa en los temores internacionales. "Es la posición que mantenemos desde el 21 de diciembre" mientras que "otros se han dedicado a perder el tiempo y a boicotear ese planteamiento", se quejó.

A partir de ahí, no dudó en presionar a Sánchez con insistencia. Partió de la base de que "se ha negado a dialogar sobre cualquier cosa", aunque, acogiéndose a lo publicado en los medios de comunicación, dio a entender que algo está cambiando. "Ahora parece que quiere saber algo –del PP-, le atenderemos como se merece", afirmó, provocando las carcajadas de los dirigentes populares. "Le vamos a decir que el PP ha ganado las elecciones, que él tiene 90 escaños y se ha presentado por la circunscripción de Madrid donde el PSOE fue cuarto y que, en democracia, hay que respetar a la gente porque 123 escaños son más que 90", relató Rajoy.

En síntesis, si el encuentro finalmente se produce -la llamada todavía no se ha producido-, Rajoy le dirá a Sánchez que votará "no" a su investidura con independencia de sus aliados. Y es que, una vez más, expuso que sólo hay dos opciones –la gran coalición o el acuerdo del PSOE con Podemos y los secesionistas- siendo todo lo demás "elucubraciones que no van a lugar alguno". Esto es, ni se plantea la abstención en caso de un pacto entre Sánchez y Albert Rivera, de Ciudadanos.

Para rematar, Rajoy exigió a Sánchez que se dé prisa. "Urge que se definan, en el Comité Federal o donde quieran" porque "España no puede estar mucho más tiempo en una situación como ésta", se reafirmó. Frente al PSOE, prometió que el PP seguirá siendo "seguro, serio y previsible" con el crecimiento económico y la creación de empleo como su gran prioridad.

Temas

En España

    0
    comentarios