Alberto Fernández, portavoz del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, fue el único que mostró su disgusto y protesta este lunes durante la entrega de premios de la Ciudad de Barcelona por la interpretación de un poema titulado Mare Nostra, una parodia de mal gusto sobre el Padrenuestro donde se incluían palabras malsonantes y que era, en esencia, una ofensa al credo católico.
Este martes, Fernández ha atendido la llamada de esRadio y ha lamentado en Es la Tarde de Dieter haber sido el único miembro de la corporación municipal que se levantara en señal de protesta al escuchar el mencionado poema. "Cuando escucho esa paradia del Padrenuestro, me levanto y abandono el acto. Nadie más se sumó a esta forma de protesta".
Respecto a las críticas del diseñador Óscar Guayabero, que se refirió a Fernández cuando recogió su premio en el mencionado acto para acusarle de no sentir rechazo por el drama de los refugiados, el portavoz popular ha querido recordar al diseñador que "la Iglesia es la mayor ONG del mundo en la acogida de estos refugiados".
Para Fernández, lo que sucedió en Barcelona es que "algunos, apelando a la libertad, lo que hicieron es defender un inexistente derecho a la ofensa y al insulto". Finalmente reflexionó diciendo que "con la Iglesia se atreven, pero me pregunto si serían capaces de, igual que han hecho una parodia del Padrenuestro, si tendrían el mismo coraje para intentar ridiculizar unos versos del Corán. Y si tanto que se atreven con la Iglesia Católica, si serían capaces de hacer lo mismo con el Islam o con la comunidad musulmana".