Menú

Aguirre, ante el vacío del PP: "Quiero dar las gracias a los que no han venido"

Casado, único representante de Génova en la presentación de su libro. San Gil pidió cambios para "volver a ser el referente de millones de personas".

Casado, único representante de Génova en la presentación de su libro. San Gil pidió cambios para "volver a ser el referente de millones de personas".
Una imagen del acto | PP Ayuntamiento de Madrid

Quienes tomaron la palabra en la presentación del libro de Esperanza Aguirre criticaron, con más o menos crudeza, a la actual dirección del Partido Popular. María San Gil, la más aplaudida, partió de la base de que la formación en la que milita está a la deriva, y reclamó cambios para "volver a ser el referente de millones de personas con orgullo y sin complejo".

El lleno fue total -más de 600 personas en la sala, con otros muchos de pie siguiendo el acto a través de una pantalla-, pero la primera fila estaba desierta de cargos afines a Mariano Rajoy. Pablo Casado fue el único miembro de la cúpula que asistió, y sus vínculos con Aguirre son harto conocidos. Reapareció Ana Botella, que no dudó en defender a su marido, José María Aznar, ante quién quisiera escucharla. Cristina Cifuentes envió a su número dos, Ángel Garrido. No acudió ni un solo ministro.

La distancia entre Aguirre y el entorno de Rajoy es enorme, y ella no quiso dejar pasar el vacío que su propio partido le había dedicado. "También quiero dar las gracias a los que no han venido", soltó poco después de tomar la palabra, lo que provocó el aplauso del auditorio. Según dijo, en caso de que tuviera "algún poder" en la formación, la asistencia de populares habría sido mucho mayor. "Su ausencia da mayor significado a este acto", destacó.

Casado encajó las críticas con Botella a su lado, haciéndole múltiples confidencias. San Gil fue breve, pero clara. Pidió regeneración para el PP, aunque no criticó directamente a Rajoy. "Tenemos que buscar el momento de renovarnos" y de "consolidar nuestro proyecto para hacerlo atractivo y sensato", arguyó. Aguirre, después, le elogió: "María es el tesoro más preciado que tiene la política española". Y, a renglón seguido, recomendó su vuelta a la primera línea de la política y vio el que no esté en el Congreso "una prueba evidente" de que las cosas no se están haciendo bien en su formación.

Aguirre tampoco se refirió a Rajoy en su intervención. De hecho, fue la más comedida de todos, aunque no dudó en reclamar el rearme ideológico al que apela en su libro Yo no me callo. "Si el centro-derecha español no acomete la tarea de rearmarse ideológicamente", avisó, muchos posibles votantes se verán desamparados. "Hemos llegado a esta situación por errores que hemos cometido todos", remató. Eduardo Serra y Albert Boadella también pidieron al PP que reaccione. "Esperanza propone soluciones a la crisis del PP" porque "cree que el partido puede salir adelante", sentenció Boadella.

Temas

En España

    0
    comentarios