Mariano Rajoy mueve ficha y pone en su punto de mira la delicada situación que atraviesa Venezuela, y en especial en cómo puede estar afectando a los casi 200.000 españoles residentes en el país caribeño. En concreto, ha convocado el Consejo de Seguridad Nacional para este mismo viernes a primera hora, antes del Consejo de Ministros. "La novedad", reconoció el equipo del presidente en funciones, es que se abordará "la crisis" en la que está inmerso el régimen de Nicolás Maduro.
La decisión, que adelantó La Sexta, se hizo pública pocas horas después de que Albert Rivera aterrizara en Madrid procedente de Caracas y retratara la calamitosa realidad en dicho país. Una visita que fue coordinada con el Ministerio de Exteriores, según confirmaron las partes implicadas. Precisamente, José Manuel García-Margallo se apoyó en dicho viaje, como también en el que hizo previamente José Luis Rodríguez Zapatero, para ordenar el regreso del embajador Antonio Pérez-Hernández a la capital de Venezuela, toda vez se marchó a España por los "intolerables insultos" de Maduro a Rajoy.
Según Moncloa, en el Consejo de Seguridad Nacional se analizará especialmente "la seguridad" de los compatriotas, aunque no se dieron más detalles. "Estamos analizando la situación y viendo las distintas posibilidades", recalcaron. Dicho órgano se reúne en casos especiales, y en él forma parte el núcleo duro del gabinete, destacando a Soraya Sáenz de Santamaría, Jorge Moragas y Margallo, entre otros ministros. También acude el Jemad y el director del CNI.
En la reunión también se abordarán otras cuestiones como el terrorismo y la crisis de los refugiados. También se aprobará el informe anual de Seguridad Nacional correspondiente al año 2015.
Mientras Moncloa confirmaba la noticia, Rajoy estaba en Toledo, donde acudió para presenciar la procesión del Corpus Christi. Una visita sorpresa que no fue anunciada a los medios de comunicación ya que, en teoría, era "privada" y el jefe del Ejecutivo iba en calidad de "católico". No obstante, no dudó en valorar los datos de crecimiento del PIB para, a renglón seguido, afirmar que "con un poco de sensatez y manteniendo las mismas políticas" España podrá consolidar "la recuperación económica".