"Franca y cordial", así resumió Mariano Rajoy la reunión que tuvo este martes a primera hora de la mañana con los familiares de las víctimas del Yak-42. Después de asumir la nueva postura marcada por María Dolores de Cospedal, hacer suyo el dictamen del Consejo de Estado sobre la tragedia y dejar caer a Federico Trillo, que ya no es embajador en Londres, el presidente tuvo un gesto más en aras de cerrar de forma definitiva la herida por el polémico caso: reunirse, trece años y ocho meses después, con los familiares de los militares fallecidos.
"Espero que seamos capaces de hacer las cosas bien. Que entre todos seamos capaces de construir", explicó el presidente tras el encuentro. En declaraciones a los periodistas después de asistir a un acto de homenaje a Rita Barberá, Mariano Rajoy señaló que durante la hora y media que duró la reunión escuchó y compartió "los sentimientos" de los familiares. "Esta vez se van a hacer las cosas bien", les insistió en privado, informa P. Montesinos.
Sin embargo, el presidente no quiso dar más explicaciones cuando le preguntaron por las aspiraciones de los familiares de las víctimas, que este martes pedían en la Moncloa que Cospedal vuelva a dar explicaciones en el Congreso cuando su ministerio tenga lista la resolución en la que trabaja para dar respuesta al informe del Consejo de Estado. "Vamos a esperar al futuro, al final. Prefiero que hablen ellos", se disculpó Rajoy pidiendo a los periodistas que no insistieran más en preguntas relacionadas con la reunión.
Sea como fuere, se trata de un giro político total que inició Cospedal, presente también durante el encuentro, y que le ha valido para salir reforzada internamente de la crisis provocada por el informe del Consejo de Estado. Precisamente, la ministra de Defensa, en charla informal con los periodistas, explicó que el Gobierno "va en serio" y que tiene intención de dar todos los pasos que sean necesarios para el reconocimiento "jurídico y moral" de las víctimas. Cabe recordar que ya se le requirió a José Bono que devuelva los documentos oficiales que obran en su poder, según sus propias palabras.
Sobre si Mariano Rajoy pidió o no perdón a los familiares, el Gobierno reconoció que el jefe del Ejecutivo no lo hizo expresamente pero que "tuvo empatía con el dolor". Un gesto que los familiares agradecieron públicamente en la rueda de prensa que ofrecieron en el palacio de La Moncloa tras la reunión. Según explicó la portavoz de la Asociación de Víctimas del Yak-42, Curra Ripollés, "es una forma de pedir perdón" el hecho de que Mariano Rajoy, que era vicepresidente en el momento de la tragedia, haya decidido reunirse con ellos.
El asunto, en todo caso, será protagonista este miércoles en la primera sesión de control al Gobierno. En concreto, el portavoz del grupo socialista, Antonio Hernando, en preguntará a Rajoy si va a asumir la petición de perdón expresada por Cospedal. "Suscribo todas y cada una de las afirmaciones de la ministra", dijo ya en su día el presidente.