Si. Pero los desordenes (en este caso) no son el problema, son la consecuencia...+++
Enviado por delta el día 30 de Septiembre de 2014 a las 00:24
Al menos para mí, esto ha sido como un calentón de dos chuloputas en una taberna: uno que te pego una ostia y el otro que te devuelvo dos.
Y ahora ya empiezan a verse desbordados: ni uno pega la ostia ni el otro tiene güebos a pegarle dos.
A mi parecer.
(*) los dos tendrían ya que estar en chirona.
Con las cosas de comer no se juega.