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El desván de Alaska

El primer número de la revista Sálvame

El 11 de febrero del 2011 llegaba a los quioscos una nueva publicación empujada por el éxito del programa de televisión. Un ejemplo más de eso que llamamos "la prensa del corazón de los lunes", tan distinta de la de los miércoles.

Exclusiva efectista
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Exclusiva efectista

La primera portada de Sálvame anunciaba el impactante reportaje de Sara Montiel que se ofrecía en el interior. Fotos exclusivas, de corte artístico-pop y una entrevista con grandes titulares. Por cierto, si se fijan en los temas destacados en sumario, casi todos los personajes han sufrido movimientos importantes desde la aparición de esta primera revista hace algo más de tres años. Veamos…

Un ser libre
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Un ser libre

Así se abría el reportaje de la Montiel, que hoy ya no está entre nosotros. Como en su momento se le dedicó esta sección de El Desván de Alaska a este reportaje completo, poco más hay que añadir. ¡Sara, te echamos de menos!

Ni contigo ni sin ti
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Ni contigo ni sin ti

Por entonces todavía coleaba la relación de Isabel Pantoja con Julián Muñoz. La cantante, seria y preocupada por los juicios que llegarían, y el exalcalde living la vida loca.

Siempre Carmen
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Siempre Carmen

La protagonista de la última ruptura sentimental anunciada desde la portada de ¡Hola! por entonces continuaba felizmente casada con José Campos, aunque la prensa intentaba separarlos cada día. Finalmente así fue, Campos acaba de ser padre con su nueva esposa y Carmen Martínez-Bordiú recompone el corazón roto que le dejó su última conquista.

Del rock a la maternidad
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Del rock a la maternidad

Pilar Rubio y Molly, el cantante del grupo Hamlet, eran una pareja sólida con una década de convivencia. Hoy Pilar es la compañera sentimental del futbolista Sergio Ramos, al que hace pocos meses ha convertido en padre.

La pasarela de la calle versión señora
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La pasarela de la calle versión señora

Es un clásico en las revistas de moda dedicar una página a eso que llaman el street fashion, o sea, la moda de la gente anónima. Se trata de retratar a los más estilosos y contar qué es lo que llevan. Sálvame encumbró esta práctica a la categoría de antropología costumbrista al dedicar la sección a las señoras en vez de a las jovenzuelas.

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