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Fórmula 1

La carrera de María de Villota

La expiloto de Fórmula 1 María de Villota ha aparecido muerta este viernes por la mañana en el Sevilla Congresos de la capital andaluza. A la espera de la autopsia, todo apunta a que la muerte se ha debido a causas naturales.

Se apagó la sonrisa de María
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Se apagó la sonrisa de María

María de Villota fue una "mujer increíble", dice de ella Susie Wolff, piloto del programa de desarrollo de Williams. Pese al terrible accidente sufrido en julio de 2012, que a punto estuvo de costarle la vida, la madrileña nunca perdió la sonrisa. Pero este viernes 11 de octubre de 2013, la muerte le ha llegado en un hotel de Sevilla. Al parecer por causas naturales, debido a las secuelas de aquel fatídico siniestro sufrido hace quince meses.

Aparece muerta tres meses después de casarse
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Aparece muerta tres meses después de casarse

El 28 de julio, María de Villota se casó por sorpresa con el entrenador deportivo Rodrigo García Millán en un faro de Santander. Tres meses antes, la pareja aparecía radiante en la Caja Mágica con motivo de la disputa del Masters 1000 de tenis en Madrid.

Con el optimismo por bandera
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Con el optimismo por bandera

Hace justo un año, el 11 de octubre de 2012, María compareció por primera vez en público para explicar el accidente sufrido tres meses antes. Lo hizo en una conferencia de prensa organizada por la Federación Española de Automovilismo (RFEA) en la sede del Consejo Superior de Deportes. "Me miro al espejo y estoy orgullosa de lo que veo", dijo sonriente María.

En Duxford volvió a nacer
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En Duxford volvió a nacer

3 de julio de 2012. Circuito de Duxford, a unos 90 kilómetros al norte de Londres. María de Villota se encontraba allí realizando unas pruebas aerodinámicas como piloto probadora del equipo Marussia y sufrió un terrible accidente que a punto estuvo de costarle la vida. Durante la larga operación a la que fue sometida, la madrileña perdió el ojo derecho.

Una piloto de raza
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Una piloto de raza

María llevaba el automovilismo en los genes: no en vano, su padre, Emilio de Villota, fue un piloto de Fórmula Uno en los años 70 y 80. Emilio participó en 14 grandes premios, aunque tan sólo llegó a disputar dos carreras en 1977, puesto que no se clasificó para las restantes.

Con Marussia dio el salto a la F1
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Con Marussia dio el salto a la F1

El 7 de marzo de 2012, apenas cuatro meses antes del accidente en Duxford, María hacía historia para el automovilismo español después de que la escudería Marussia la confirmase como su piloto de pruebas para ese año en el Mundial de Fórmula Uno.

Junto a los mejores
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Junto a los mejores

Antes de dar el salto al gran circo con Marussia, donde acabaría compartiendo equipo con Timo Glock y Jerome D'Ambrosio, María de Villota llegaba de competir en diversas categorías de monoplazas como la Fórmula 3 española, las 24 Horas de Daytona, las Euroseries 3000 y la Superleague Fórmula.

Colchonera confesa
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Colchonera confesa

En junio de 2010, María fue presentada en el estadio Vicente Calderón como piloto del equipo Superleague Fórmula defendiendo los colores del Atlético de Madrid. Su equipo de toda la vida, segçun confesaba María. "Cada vez me considero más atlética, antes lo era desde la grada y ahora me veo como una persona más del club", dijo durante el acto junto al presidente de la entidad, Enrique Cerezo.

'La vida es un regalo'
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'La vida es un regalo'

Así se titula el libro que María de Villota tenía previsto presentar el próximo lunes en Sevilla. Un testimonio conmovedor lleno de coraje que invita al optimismo pese al grave accidente que sufrió en verano de 2012. Ahora, con la triste noticia de su muerte, se ha decidido suspender el acto. 

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