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Oslo: el verano sin calor puede ser maravilloso

Preciosa y moderna urbe no apta para los que buscan el calor de la playa mediterránea. Oslo es historia, naturaleza, arquitectura, arte, música y la cara más urbana del pueblo noruego. Un recorrido por sus rincones más significativos, nuevos barrios, museos imprescindibles y estampas con una luz especial.  

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El parque del palacio real, en noruego Slottsparken, es otra de las zonas verdes que más utilizan los ciudadanos de la ciudad para practicar deporte o pasear. Rodea el palacio real y en las estaciones de primavera y verano muestra todo su esplendor.  

El palacio real de Oslo
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El palacio real de Oslo

El palacio real, construido en Christiania (nombre que tenía Oslo hasta 1925) está abierto al público hasta agosto. Su fachada principal conecta con la avenida principal de la ciudad, la calle Karl Johans.

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Hasta finales de agosto se puede visitar el interior del palacio real de Oslo, un edificio emblemático de la ciudad que se encuentra en un lugar privilegiado y elevado, desde donde se podía ver la llegada de los barcos a la ciudad.

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El verano en Oslo puede ser maravilloso. Con una temperatura agradable, que nunca sofoca al viajero, minutos después de salir el sol entre la nubes sus calles se llenan de gente, como si toda la ciudad saliera de sus casas a celebrarlo en una especie de ritual estival. 

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Oslo es una ciudad construida junto al fiordo y en ella se encuentran multitud de parques y espacios naturales. Noruega en su conjunto es pura naturaleza y todo emplazamiento humano parece haber sido edificado en función de la misma. Es un verdadero placer pasear por sus parques y avenidas repletas de espacios verdes y flores. 

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  Den Norske Opera & Ballet es la mayor institución musical y de arte escénico de Noruega. Es posible pasear por toda su cubierta y visitar su fabuloso vestíbulo.

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El edificio de la ópera es, con toda seguridad, el más emblemático y reconocible de la ciudad de Oslo. Su piedra blanca, su amplia cristalera y la posibilidad de caminar por su techo lo convierten en único en el mundo. 

Edificio de la ópera de Oslo
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Edificio de la ópera de Oslo

Caminar sobre la ópera y llegar al mar es posible. El edificio fue diseñado para que se pudiera pasear desde su base hasta lo más alto de su construcción. Un lugar de encuentro para los oslenses y punto de referencia para cualquier viajero.  

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Sus enormes ventanas a ras del suelo facilitan que puedan verse los ensayos o las actividades que se desarrollan en el interior del edificio de la ópera de Oslo, que está construido fundamentalmente con madera de roble. El vestíbulo principal tiene forma de herradura, como tributo a los teatros clásicos de la antigüedad. 

El Palacio del Storting, sede del parlamento nacional de Noruega
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El Palacio del Storting, sede del parlamento nacional de Noruega

El Parlamento noruego, al lado de la calle Karl Johans fue inaugurado en 1866 y es la sede de la asamblea nacional noruega. Es posible visitar algunas de sus salas pero la mejor estampa se consigue desde el exterior y al atardecer. 

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El atardecer en Oslo es otro de esos momentos a enmarcar que regala la ciudad, si el tiempo lo permite. En las cercanías del palacio real se encuentra una zona que mezcla diferentes estilos arquitectónicos. Las inmediaciones del Ministerio de Exteriores noruego y la calle Victoria Terrasse.

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En esta zona de la ciudad que tiene salida al mar estaba repleta de prostíbulos y casas de juegos para los marineros que llegaban en sus barcos. A principios del siglo XX se decidió que no era muy adecuado que la primera imagen al llegar al puerto de Oslo fueran esta y en un periodo de pocos años se derrumbaron este tipo de edificios para construir el actual ayuntamiento.

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El interior del ayuntamiento de Oslo. Su característica arquitectura y la celebración de la ceremonia del Premio Nobel de la Paz lo convierten en uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad y también de los más visitados. 

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El ayuntamiento fue finalmente inaugurado el 15 de mayo de 1950, coincidiendo aproximadamente con el nonacentenario de la fundación de Oslo. En la imagen, una escultura que recuerda a la época de los prostíbulos, donde se ve a una prostituta con dos hombres.

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Tjuvholmen es el nuevo distrito surgido en la capital noruega, ganando terreno al mar, en las inmediaciones de Aker Brygge, los antiguos astilleros. 

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El museo de Astrup Fearnley es uno de sus edificios más significativos. Un museo privado de arte contemporáneo que realiza exposiciones temporales de artistas noruegos e internacionales y alberga la colección de Astrup Fearnley, una de las colecciones privadas más amplias de Noruega.

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El museo, que fue diseñado con un original techo de cristal con forma de vela de barco, está emplazado en este barrio nuevo, con una hermosa vista del fiordo de Oslo frente a él.

Arte en Oslo
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Arte en Oslo

No todo se acaba con Edward Munch. Noruega y Oslo más en concreto, presumen de ofrecer a sus ciudadanos arte en muchos de sus rincones. Pushwagner es uno de los artistas contemporáneos más importantes de Noruega. La galería se encuentra en Tjuvholmen, hogar de muchas galerías de arte.

Barrio de Bygdoy
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Barrio de Bygdoy

Bygdøy es una barrio de Oslo ubicado en una península occidental de la ciudad. En este lugar se mezclan los bosques y las viviendas, con los museos más importantes de la ciudad como el museo de barcos Vikingos, el de la Balsa Kon-Tiki o el de Fram. También está situado el palacio de verano de la familia real noruega. 

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Noruega es un país seguro y sus ciudadanos confían en esta seguridad. Casi todas las propiedades de su territorio no permanecen cerradas bajo llave como pudiera verse en otros lugares del mundo. Es posible ver un garaje con un Tesla y repleto de herramientas casi a pie de calle. 

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El museo de los barcos vikingos es una parada obligada, si se es un aficionado de este pueblo y de esta época. En este museo se pueden admirar tres barcos, uno de ellos sólo los restos, que fueron naves funerarias vikingas de hace más de 1000 años, además de muchos objetos cotidianos de al época vikinga. 

Museo del Pueblo Noruego
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Museo del Pueblo Noruego

En la zona de Bygdoy se encuentra el primer museo al aire libre del mundo, el Museo del Pueblo Noruego que ofrece una perspectiva general de la historia de la construcción de casas en Noruega. Es necesario dedicarle varias horas ya que su extensión es grande pero manejable. 

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Los sábados y domingos durante el verano, el museo al aire libre de casas más grande del mundo, el Norsk Folkemusseum ofrece una sorpresa a sus visitantes. Varios actores se visten de varias épocas de la historia noruega y habitan sus casas, realizando tareas propias de su época. Es divertido ver también animales y cultivos reales poblando sus campos.

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Otra estampa del Museo del pueblo noruego. En este caso con edificaciones reales de hace más de 500 años.

El faro del puerto Kavringen
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El faro del puerto Kavringen

Al cruzar el fiordo desde la ciudad de Oslo hacia la península de Bygdoy se puede ver, en mitad del mismo, el faro del puerto Kavringen. Además de ser muy útil para los barcos, regala una bonita fotografía para los viajeros. 

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Navegar por las aguas en calma del fiordo de Oslo podría definirse como un lujo para los más pudientes. Puesto que no todo el mundo puede permitirse tener un yate o un pequeño barco en propiedad, nos conformaremos con disfrutar de las vistas desde algún ferry, de los muchos que cruzan a lo largo del día. 

Museos de Fram y Kon-Tiki
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Museos de Fram y Kon-Tiki

La península de Bygdoy, que es un barrio de Oslo, alberga una de las zonas de mayor concentración de museos de Noruega. Se pueden visitar el museo Fram, el museo de barcos vikingos, el de Kon-Tiki o el Museo del pueblo noruego. Es posible llegar en ferry desde las cercanías del ayuntamiento. 

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El museo de Fram, con una forma muy peculiar, alberga en su interior el barco polar Fram, icono nacional de Noruega. 

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Este enorme barco de madera es una reliquia de la época de las expediciones polares que se conserva con mucho esmero y cuidado en el museo Fram. Es posible visitar su interior o subir a uno de los tres niveles de pisos desde los que admirar su casco exterior.

Fiordo de Oslo
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Fiordo de Oslo

Los 100 kilómetros de longitud del fiordo de Oslo son un regalo que la naturaleza ha permitido a la ciudad noruega. En verano su tráfico de embarcaciones, desde barcas de pescas, yates o grandes cruceros, aumenta considerablemente. 

La fortaleza de Akershus
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La fortaleza de Akershus

La fortaleza de Akershus, es un castillo medieval construido hacia 1300 y que permitía proteger la ciudad de posibles ataques enemigos. En la actualidad sus salones se utilizan para actos oficiales del gobierno noruego.

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Muchos son los caminos y paseos que se distribuyen por el interior de los terrenos del castillo de Akershus. Tanto es así, que para muchos, caminar por ellos es como perderse en otra época.

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En el interior de la fortaleza y castillo de Akershus están desplegados algunos miembros del cuerpo de la Guardia Real Noruega. Impecables, limpios y sobre todo altos y guapos, los hombres y mujeres que forman este cuerpo guardan el castillo y sus terrenos y de paso sorprenden a más de uno. 

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En el interior del recinto amurallado de Akershus hay rincones para enmarcar. Es posible encontrar las caballerizas donde todavía se guardan algunos caballos. 

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Las vistas desde la ópera de Oslo son impresionantes. Poder estar a un paso del agua, disfrutar del sol, si fuera posible y pasar un rato agradable sobre su suelo blanco de piedra, es digno de ser incluido en las recomendaciones de cualquier revista de viajes. 

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Los noruegos no tiene reparo en mostrar su patriotismo. Muchos colocan la bandera nacional en sus casas o tejados. En este caso, en el edificio de la facultad de derecho, de la Universidad de Oslo, en la calle Karl Johans.

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Los músicos callejeros, conciertos en los pubs y restaurantes, las terrazas llenas son la nota predominante en el paisaje urbano del centro de Oslo en la época estival. 

Proyecto Barcode
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Proyecto Barcode

La zona del Barcode, coloquialmente llamada así por los oslenses, ha redefinido el skyline de Oslo. La forma y el diseño de las torres de oficinas que pueblan esta manzana de la capital noruega ofrece un perfil que se asemeja a un código de barras. 

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Los trolls y los vikingos, posiblemente los dos iconos más representativos de la historia y la cultura popular noruega. 

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El tranvía en Oslo es el medio de transporte más práctico para llegar a todo los rincones del centro. Además permite disfrutar de la ciudad en todo su esplendor. 

Parque Vigeland
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Parque Vigeland

El resultado de toda una vida dedicada a la escultura es el parque Vigeland. Este excepcional parque es la obra de Gustav Vigeland que muestra más de 200 esculturas de bronce, granito y hierro forjado. 

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