IV centenario de la Plaza Mayor de Madrid
La Plaza Mayor de Madrid que conocemos en el siglo XXI fue escenario de numerosos actos públicos, como corridas de toros, autos de fe, carnavales, ejecuciones públicas o la beatificación de San Isidro, santo patrón de Madrid. Originalmente se la llamó Plaza del Arrabal, al estar fuera del recinto medieval amurallado de la ciudad. Pasear por esta plaza porticada, de 129 metros de largo por 94 metros de ancho, con 377 balcones es trasladarse a otra época en de la historia de Madrid. Tiendas legendarias con encanto, muchas del siglo pasado, la estatua ecuestre de Felipe III o tabernas castizas, donde degustar la gastronomía madrileña, son algunos de los pedazos de historia que han sido añadidos durante cuatro siglos para enriquecer el valor de esta plaza conocida a nivel mundial.
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Casa de la Panadería
La fachada más reconocible de la Plaza Mayor de Madrid es la de la Casa de la Panadería, uno de los principales edificios del conjunto histórico con frescos de Carlos Franco. En su interior se encuentra el Salón Real, desde el que se pueden ver las mejores vistas de la plaza.
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La fachada de la Casa de la Panadería
La decoración de la fachada de la Casa de la Panadería no ha sido igual a lo largo de los años, debido a las reformas y rehabilitaciones. Las pinturas murales que cubren hoy el edificio son obra de Carlos Franco, con figuras mitológicas relacionadas relacionadas con Madrid. En la parte superior y centrado se encuentra labrado en piedra un blasón con las armas de Carlos II. David Alonso Rincón
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Cuatro siglos de historia
Después de pasar por varias etapas, a lo largo de cuatro siglos, la Plaza Mayor de Madrid ha sido un punto de encuentro de muchos acontecimientos y personas de diferente condición. Actualmente es uno de los lugares más concurridos por turistas de diferentes países. De fondo, en los soportales, una de las puertas de entrada a la plaza, por la calle de Gerona.
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El reloj de la Casa de la Panadería
En las dos torres de la Casa de la Panadería se ubican dos mecanismos a la vista de los viandantes. En la torre izquierda un gran reloj y la torre de la derecha un barómetro indicaba el tiempo a los madrileños. Una flecha señalaba el tiempo que podía ser: Gran lluvia, Lluvia, Variable, Buen Tiempo o Muy Seco. Desde hace algunos años el mecanismo ha dejado de funcionar y la flecha ha quedado fija indicando Buen Tiempo.
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Casa de la Carnicería
La Plaza Mayor empezó a cimentarse sobre el la zona donde se ubicaba la antigua Plaza del Arrabal, lugar de referencia para el mercado más popular de la villa a finales del siglo XV, cuando se trasladó la corte de Felipe II a Madrid. De fondo, la estatua ecuestre de Felipe III y la Casa de la Carnicería, que será reconvertida en un hotel de lujo a partir de 2019.
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Tabernas castizas de otro siglo
Continuando con el paseo por las curiosidades de la Plaza Mayor de Madrid es necesario pararse en algunas de las tiendas legendarias, muchas del siglo pasado y tabernas castizas que ya forman parte de la historia de la Plaza Mayor y de la ciudad. Una de estas tabernas es la cervecería Éboli.
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Tabernas castizas de otro siglo y con mucha historia
Otro curioso restaurante situado en los soportales de la Plaza Mayor es La Torre del Oro o Bar Andalú. Existe desde 1903 y después de pasar por varias generaciones, el actual dueño, lo ha decorado con motivos taurinos. La carta recoge lo más típico de la cocina andaluza: 'pescaíto' frito, calamares a la andaluza o huevos rotos.
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Estatua ecuestre de Felipe III
Sin duda el punto de reunión y centro de atención de la Plaza Mayor de Madrid es la estatua ecuestre de Felipe III que fue comenzada por el escultor italiano Juan de Bolonia y terminada por su discípulo Pietro Tacca en 1616. En 1848 la reina Isabel II ordenó su traslado desde su emplazamiento anterior al actual.
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Las terrazas y los soportales
Las terrazas, siempre llenas de turistas o madrileños son otro de los atractivos de la Plaza Mayor de Madrid.
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Gastronomía y terrazas al sol
Son decenas los restaurantes y bares que ofrecen un gran listado de platos típicos de la gastronomía madrileña. En la actualidad, aprovechar un día soleado para tomarse una cerveza o un buen vino, comer o tapear en las terrazas de la plaza es uno de los placeres de la capital de España.
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La historia que esconden las farolas de la Plaza Mayor
Las farolas de la Plaza Mayor guardan una curiosidad oculta en sus asientos. Cada una de ellas tiene en su respaldo una serie de bajorrelieves en bronce que cuentan algunos de los episodios históricos que han tenido lugar en la Plaza, como por ejemplo en este caso, los ajusticiamientos y autos de fe.
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La foto en el centro de la Plaza Mayor
Una fotografía posando delante de la Casa de la Panadería es, sin lugar a dudas, el mejor recuerdo de la Plaza Mayor y con el que se identifica Madrid por la mayoría de los turistas.
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La historia que esconden las farolas de la Plaza Mayor
Otra de las farolas donde desde hace algunos años han sido colocados candados voluntariamente por las personas que se acercaban a la misma. En la base, un bajorrelieve recordando la importancia de los carnavales para la ciudad de Madrid.
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Escaparates curiosos
Los establecimientos bajo los soportales de la Plaza Mayor son tan diferentes como curiosos. Pasan de una temática filatélica a tabernas castizas, tiendas de sombreros o souvenirs para turistas.
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Tiendas centenarias y que han perdurado en el tiempo
Desde 1894, está abierta la tienda de tocados más antigua de Madrid, es La Favorita. Además de tocados, también es posible encontrar todo tipo de sombreros y las famosas botas de vino de las tres ZZZ.
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Bocadillo de calamares, un clásico
Son muy tradicionales en este plaza madrileña y sus alrededores los establecimientos donde venden bocadillos de calamares. Es uno de los platos típicos de la gastronomía madrileña y su historia va ligada a la de la Plaza Mayor. .
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El Arco de Cuchilleros
El arco de Cuchilleros es obra de Juan de Villanueva. El origen de su nombre está en la calle de Cuchilleros a la que da salida, y en la que antiguamente se ubicaban los talleres del gremio de cuchilleros, pues suministraban sus artículos al gremio de carniceros afincado dentro de la plaza.
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La calle de la Escalera de Piedra
Para acceder a la Plaza Mayor de Madrid por el Arco de Cuchilleros hay que pasar por la calle de la Escalera de Piedra cuyo cartel es otra de las curiosidades de este rincón con tanta historia.
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Calle de Gerona
Una de las entradas más famosas y concurridas para acceder a la Plaza Mayor es a través del arco al que se llega por la Calle de Gerona. Atravesarlo es como trasladarse a otra época en sólo unos pocos metros.
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Los actores modernos de la plaza
Pintores, retratistas, personajes de ficción disfrazados o artistas de las pompas de jabón, son algunos de los actores modernos que pueblan la plaza y enriquecen su atractivo.
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IV centenario de la plaza
Como en muchas ciudades del mundo, el talento de los retratistas callejeros está muy presente. Madrid no podía ser menos.
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Las calles que llevan a la Plaza Mayor
La Plaza Mayor de Madrid dispone de diez accesos: 7 de Julio, Arco de Triunfo y Felipe III al Norte; Sal, Zaragoza y Gerona al Este; Botoneras, Toledo y Cuchilleros al Sur.
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Una vista general de la Plaza Mayor de Madrid con la estatua de Felipe III en el centro y de fondo la Casa de la Panadería.
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