Siete grandes momentos del reinado de Felipe VI
Este viernes 19 de junio se cumple un año de reinado de Felipe VI. Doce meses que han bastado para restaurar la imagen maltrecha de la monarquía tras años de escándalos familiares y políticos. Aún queda mucho por hacer, pero la línea de trabajo del Rey parece ya definida, como queda claro tras su golpe de efecto con la infanta Cristina.
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El pasado 19 de junio de 2014 fue, sin lugar a dudas, uno de los días más importantes de Felipe VI. El día de su proclamación estuvo repleto de imágenes históricas. Su discurso fue vibrante, reivindicando los principios de la Monarquía Parlamentaria.
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Felipe VI y Letizia Ortiz, desde que son reyes de España, parecen vivir uno de sus momentos más cómplices como pareja. Las muestras de cariño han regresado, y los momentos de crisis y discusiones motivadas por los problemas de la institución -desde Corinna al caso Nóos- parecen haber quedado atrás. Sus salidas de ocio al cine o restaurantes siguen produciéndose de continuo. Las últimas imágenes familiares difundidas por Casa Real ahondan en esa línea.
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Desde su salida del trono, don Juan Carlos casi ha desaparecido de la agenda oficial. Aunque eso no quiere decir que no se haya dejado ver. El rey emérito ha emprendido su particular ruta gastronómica, y entre eso y sus viajes a Arabia Saudí, también ha logrado ser noticia. Las desavenencias internas entre padre e hijo, eso sí, parecen haberse saldado durante este año de nuevo reinado, o al menos dejar de importar tanto. Por mucho que la fractura familiar no haya hecho más que consumarse.
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El primer discurso de Navidad de Felipe VI no pudo saldarse con más éxito. Pese a algún exceso de realización, la nueva iconografía y el mensaje de autocrítica del nuevo Rey, que arremetió claramente contra la corrupción, calaron en la población. La audiencia fue la mejor desde 2008, superando en más de un millón y medio al último de Juan Carlos.
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Algunos de los mejores gestos de Felipe VI son los improvisados. Sin que figurase en su agenda, el Rey apareció por sorpresa en los pasos de la Semana Santa sevillana. La última vez que había acudido a las procesiones de Sevilla fue hace 31 años, en el año 1984.
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Sin duda, uno de los momentos más gratos en lo personal ha tenido que ser la comunión de la Princesa de Asturias, Leonor de Borbón, el pasado 20 de mayo. Todo ello pese a lo casi clandestino de la ceremonia, realizada en un miércoles y sin ningún brillo o pompa ceremonial. Al fin y al cabo, se trataba de la Princesa de Asturias.
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El último gran golpe de efecto de Felipe ha sido desposeer a su hermana, la infanta Cristina, de su título de duquesa de Palma, que compartía con su marido Iñaki Urdangarín. Tras los últimos avances en la investigación de Nóos, el Rey tomó una decisión tajante que sin duda ha debido afectar a la ya maltrecha -o inexistente- relación familiar.
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