Más de ocho horas después de que fuentes oficiales confirmaran que Zapatero se había
comprometido a fijar su posición respecto al inminente relevo de las tropas en Irak, el PSOE da marcha atrás con un desmentido. El regreso de los soldados fue la promesa electoral más firme de Zapatero y por eso Aznar, presidente en funciones, le solicitó que argumentara por escrito cómo acometer primero el relevo. Ahora el PSOE dice que le corresponde en exclusiva a Aznar.